Esta topografía ha permitido conocer la "
impresionante" volumetría de la cueva, en torno a un millón de metros cúbicos, con una superficie total de casi 200.000 metros cuadrados (20 hectáreas), y 20 galerías desconocidas con gran profusión de excéntricas, falsos suelos, pisolitas y otro tipo de formaciones. También se han descubierto dos nuevos ríos o arroyos que se suman a los cuatro ya conocidos.
El trabajo, realizado entre julio de 2008 y agosto de 2009, va a permitir avanzar "a pasos de gigante" en las investigaciones que se llevan a cabo en el complejo, y ha revelado informaciones inéditas sobre la profundidad de las aguas subterráneas, nuevas especies y organismos vivos, lugares de interés geológico "sorprendentes", así como la ubicación del patrimonio minero, según explicó hoy el presiente de la Asociación de Cuevas Turísticas de España (ACTE) e investigador del Instituto Geológico y Minero, Juan José Durán.
Se trata en suma de nuevas líneas de desarrollo científico sobre esta cavidad que han conducido a descubrimientos, pero también han dejado "numerosas incógnitas" sin explorar que pueden dar lugar a "grandes sorpresas", afirmó Durán, que presentó en rueda de prensa el resultado de los trabajos junto con el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Francisco Javier López Marcano, y Martín González, representante de la empresa Zalama Multiservicios, encargada de la topografía.
Marcano destacó que por primera vez el sistema mina-cueva está representado en tres dimensiones, lo que permite tener una visión "casi real" de la arquitectura del sistema endokárstico y su relación con la superficie topográfica exterior, lo que será "extraordinariamente útil" para el desarrollo de las labores de investigación.
Para ello, el equipo ha realizado 150 entradas por diferentes bocas de acceso y ha ubicado 3.900 estaciones (puntos topográficos de referencia) en el interior de la cavidad y 3.500 en las galerías mineras.
La topografía en 3D, una labor "ímproba" que ha obligado a trabajos "muy penosos", según Durán, ha permitido revisar la totalidad de la galería y salas del complejo y descubrir que lo que se conocía era "sólo una parte" de ese mundo subterráneo, además de haber convertido "la sospecha en realidad" sobre la existencia de nuevas galerías.
También se ha comprobado que otras cavidades adyacentes tienen la misma génesis que El Soplao, con el que se podrán conectar y que tendrá "bastantes más kilómetros de desarrollo", dijo.
Especie troglobia
Entre los hallazgos en el campo de la biología, explicó que se ha detectado una especie troglobia (organismo adaptado a la vida en las condiciones extremas del interior de las cavidades), de diplódo espigmentado, actualmente en estudio, que pudiera ser una nueva especie para la ciencia endémica en El Soplao.
En este sentido, destacó el "fuerte impulso" que supone esta investigación en el campo de la bioespeleológía, ya que permite conocer mejor la adaptación de este tipo de organismos al mundo subterráneo, con la importancia que ello tiene para el estudio de los de carácter extraterrestre.
También destacó que la información sobre la profundidad del agua subterránea ayudará a conocer y gestionar mejor las existentes en la región.
En materia de patrimonio, el impulso ha sido igualmente "enorme", según Durán, ya que se han detectado lugares de interés geológico "sorprendentes". En cuanto al minero, señaló que se conocía que una parte importante estaba en la mina de La Florida, pero no dónde, lo que ahora ya se sabe al haberse encontrado una serie de enclaves "de calidad y cantidad".
Cueva "pionera"
El presidente de la ACTE señaló que este trabajo pude ser puesto como "ejemplo de productividad", ya que con "poca inversión" se ha realizado "mucho trabajo", fruto de la capacidad del equipo que trabaja en el "entorno" de El Soplao, una cueva "pionera" en muchas iniciativas relacionadas con el turismo subterráneo, subrayó. "Es de lo mejor que se está haciendo a nivel mundial en investigación y gestión", recalcó.
Por su parte, Martín González explicó que estos trabajos se han desarrollado en varias fases, la primera consistió en localizar las entradas, para luego "reexplorar" la cueva, visitando todas las galerías, y seguidamente realizar las labores topográficas. empezando por la localización de las entradas
Una de las nuevas galerías descubiertas llevará el nombre de Cristina Zorrilla, la espeleóloga fallecida cuando trabajaba en El Soplao.
Como curiosidad, durante el tiempo que ha durado la investigación, los miembros del equipo han sacado de la cueva dos o tres kilos diarios de basura no minera.
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