Las frías relaciones entre Rajoy y Aguirre

Entre Mariano Rajoy y Esperanza Aguirre sigue sin haber ‘feeling’ por mucho que ambos en los actos públicos intenten disimularlo, al igual que la presidenta de la CAM hace también con el alcalde madrileño, Alberto Ruíz Gallardón, a pesar de que sus peleas son ya todo un 'clásico'.

El pulso que la lideresa mantuvo con Rajoy durante aquellas aciagas largas semanas en las que amagó con disputarle el liderazgo del partido acrecentó aun más la escasa sintonía que siempre ha habido entre ellos.

Ahora, con el caso Gúrtel minando la credibilidad del partido a pasos agigantados, el nuevo ‘puñetazo’ que ha dado Aguirre encima de la mesa forzando la expulsión del Grupo Popular de tres de sus antiguos ‘puntales’ salpicados de lleno de por el escándalo, el ex consejero de Deportes Alberto López Viejo, el ex portavoz Benjamín Martín Vasco y el diputado Alfonso Bosch, ha conseguido ahondar un poco más la herida.

Aunque era una decisión que Aguirre que ya había dejado entrever días atrás, lo cierto es que no la consultó con Mariano Rajoy con el que apenas habla, ni de este ni de ningún otro tema. La dirigente madrileña actua por libre, calcula muy bien sus ‘jugadas’ y no está dispuesta a que la trama de corrupción se la lleve a ella por delante.