www.diariocritico.com

¿Equidad ideológica?

viernes 13 de noviembre de 2009, 04:15h

El próximo 24 de noviembre se celebrarán 150 años de la publicación de uno de los libros que más han cambiado la forma en que el ser humano se concibe a sí mismo: El origen de las especies, de Charles Darwin.

Un debate frecuente al hablar de Darwin, y en general de la ciencia, es por qué se da un estatus tan especial al conocimiento científico. ¿Por qué se prefiere, en biología, la evolución al creacionismo? ¿Por qué nuestra Constitución exige que la educación sea laica y “ajena a cualquier doctrina religiosa”, y a la vez basada “en los resultados del progreso científico”? ¿No son casos claros de discriminación ideológica?

La pregunta de fondo es si todas las ideologías tienen el mismo valor. ¿Deben todas ser respetadas por igual? ¿Son todas igual de útiles?

En primera instancia, desde el punto de vista de la tolerancia, parecería que la respuesta debe ser positiva, para evitar la discriminación.

Pero lo cierto es que las ideologías y formas de ver el mundo difieren, a veces radicalmente, y compiten entre sí. Además de la disputa evolucionismo/creacionismo, están los debates entre los puntos de vista científico y religioso respecto al aborto, la eutanasia; o entre la ciencia y muchas “terapias alternativas” basadas en principios esotérico-místicos.

En realidad, el valor de cualquier ideología depende del contexto: qué problema hay que resolver, de qué campo de aplicación se trata. Los constituyentes privilegiaron la ciencia por sobre la religión en parte debido a los conflictos históricos entre la iglesia y el estado en México, y en parte por su convicción de que el progreso científico y técnico es importante para el bienestar de la nación. Las terapias alternativas fraudulentas no son efectivas, y a veces resultan nocivas. Y los biólogos prefieren el darwinismo al creacionismo porque les permite explicar la naturaleza y abre nuevas vías de investigación.

En el fondo, la ventaja de la ciencia es que funciona. Otras perspectivas, como la místico-religiosa, pueden ser útiles en ciertas áreas de la vida humana, pero no como formas de entender el mundo natural y mucho menos de resolver problemas prácticos, como los de salud.

lacienciaporgusto.blogspot.com

[email protected]

Opinión extraída del Periódico Milenio 12/11/2009

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios