La FAO pide más apoyo en la lucha contra el hambre

La ausencia de muchos líderes mundiales socavó desde el comienzo la cumbre de alimentos de Naciones Unidas de esta semana, y su declaración final muestra que se logró poco progreso en la lucha contra el hambre. Funcionarios de Naciones Unidas se mostraron optimistas durante la reunión celebrada en Roma del 16 al 18 de noviembre, diciendo que logró amplio apoyo a la necesidad de enfocarse en el desarrollo de la agricultura a largo plazo -en vez de ayuda de emergencia- para que los países pobres cultiven sus propios alimentos. "Es un vaso mitad lleno, mitad vacío", dijo Jacques Diouf, director general de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por su sigla en inglés) de Naciones Unidas, quien convocó la cumbre para llamar la atención sobre la situación de más de mil millones de personas que pasan hambre. "Logramos algo de progreso para revertir la disminución de inversiones en la agricultura (...) pero no fue tan lejos como la FAO habría querido ver", indicó a la conferencia de prensa final.
La ausencia de líderes de la mayoría las economías más grandes del mundo bajó el perfil de la cumbre, y no ayudó a los esfuerzos por situar la desnutrición y escasez de alimentos en la cima de la agenda política.

"Es una gran decepción que los líderes de los países más grandes y ricos no hayan venido", afirmó Gawain Kripke de la agencia de ayuda Oxfam. "Sin ellos es difícil imaginar cómo el mundo enfrentará estos desafíos de hambre y aumentará la productividad agrícola", señaló, añadiendo que la cumbre sólo lanzó "migajas" a aquellos que no tenían suficientes alimentos para comer. Menos de un tercio de los 192 jefes de estados y gobiernos invitados por la FAO asistieron, y muchos países enviaron a sus ministros de agricultura en su lugar.   Pero la declaración de la cumbre sólo prometió eliminar el hambre "en la fecha más temprana posible", y no fijó objetivos o un marco de tiempo para más inversiones en el desarrollo de la agricultura. La declaración tampoco fijó compromisos respecto a asuntos conflictivos tales como cómo atacar la especulación del mercado, reducir la volatilidad de los precios y regular las compras de tierras en el extranjero por naciones ricas que importan alimentos.