www.diariocritico.com
La crisis agrícola

La crisis agrícola

sábado 21 de noviembre de 2009, 10:49h
Tanto va el cántaro a la fuente que al final acaba por romperse. El popular dicho vale, en este caso, para reflejar la situación que atraviesa el campo español. Se ha dicho en infinidad de ocasiones, que existe un desfase descomunal en torno a las materias primas. Parece que cuando hablamos de esto, nos estamos refiriendo al petróleo y derivados. Pues no. Ya con motivo de la utilización combustible de algunos cultivos, como la caña de azúcar, o la cebada, se habló, antes de que estallara la crisis, de las desproporciones que se estaban produciendo entre los precios en origen de estos productos y los de su consumo finalista.

   Hubo países como Brasil que encontraron un chollo en los "biocarburantes". Y el precio de los productos con los cuales se elaboran este tipo de combustible empezaron a subir como la espuma. Se  argumentó, entonces, la escasa oferta. Y entonces, hubo quien criticó públicamente, - yo entre otros-,  la Política Agraria Común. Esa que incentiva la destrucción de cultivos en un continente que, el siglo pasado, era considerado "el granero del mundo". Para los burócratas de Bruselas, siempre los mismos, es mas barato pagar al agricultor para que no plante que mantener una sobreproducción.

   Pero mira por dónde, la vida da muchas vueltas y lo que antes sobraba, ahora falta. Y de eso, como siempre se aprovechan los especuladores. Y los que pagan el pato, también como siempre, son los productores, por una parte, y los consumidores por otra. Y si no se lo creen, ahí tienen el ejemplo mas claro. Los ganaderos apenas reciben un céntimo por litro de leche cuando, aún a pesar de la rebaja descomunal que se ha producido como consecuencia de la crisis del consumo, ese mismo litro se sitúa en un euro en los supermercados. ¿Adónde va a parar esos 99 céntimos de margen?

   Donde siempre. En el camino de productos y servicios se dejan muchos millones en este país. Ese es el mal. El pecado capital del español no es otro que el oportunismo. Saber aprovechar las circunstancias en beneficio propio. Los demás, la colectividad, importan un carajo.

   Por eso no es de extrañar que agricultores y ganaderos hayan dicho ¡¡¡basta¡¡¡. Y, otra vez a la calle. Huelga general en el campo español y manifestación son dos de las escasas salidas que les deja un gobierno que sigue sin enterarse de nada. O, vamos a ver, señor Rodríguez Zapatero, ¿no son los agricultores y ganaderos un sector desfavorecido, esos a quien dice representar?

   Fernando Moraleda, antes de ser el controvertido secretario de Estado de Comunicación, y alto cargo del Ministerio de Agricultura, era el dirigente de UGT del sector agrario. ¿Qué hará el señor Moraleda ante esta situación que viven sus amigos y compañeros de actividad? Es la terrible esquizofrenia en que vivimos en este país. Desgraciadamente.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios