Adicionalmente, los choferes aceptaron la propuesta del Gobierno, consistente en elaborar los proyectos de Ley de Seguridad Vial, adecuar el Código de Tránsito a la actual Constitución y la Ley del Transporte; pero el dirigente Dino Villca anunció que el acuerdo no se firmará mientras no se cumplan sus exigencias. El paro sigue.
Al cierre de esta edición, el diputado René Callisaya, que media en el conflicto, informó que hasta las 23.30 de anoche, ningún ministro se hubiera comunicado con los choferes para suscribir el convenio final
El Decreto 420 establece sanciones para los ebrios al volante, acciones que se amplían a propietarios y empresas, lo que es rechazado por el sector.
En una demostración de endurecimiento de la posición gubernamental, ayer el presidente Evo Morales anunció una “ley seca” para sancionar a conductores profesionales y particulares que manejen ebrios, “porque estamos hablando de la vida”.
Ramiro Delgado, jefe de gabinete del Ministerio de Gobierno, informó a La Prensa que “aún no se ha elaborado esa ley seca. Seguramente, en breve, las autoridades comenzarán a preparar ese proyecto”.
Anoche, el director general de Transporte Terrestre, Emilio Rodas, explicó que el Ejecutivo propuso a los choferes participar en la elaboración de la Ley de Seguridad Vial, que “delimitará las responsabilidades públicas, privadas y del Estado. Establecerá un marco normativo”.
Durante la primera jornada de protesta en La Paz y El Alto, hubo incidentes; se vieron chicotazos, rotura de parabrisas y enfrentamientos con la Policía, aunque circularon taxis, radiotaxis y algunos minibuses.
Los desórdenes provocados por los choferes derivaron en el arresto, en La Paz y El Alto, de unas 43 personas, que fueron puestas a disposición del Ministerio Público para ser procesados.
Dirigentes de la Federación de Juntas Vecinales y del Comité Cívico de La Paz se declararon en huelga de hambre contra el paro de los choferes y anunciaron para hoy una marcha de rechazo a la actitud de los conductores.
Los conductores se dirigieron ayer desde sus sedes sindicales hacia la Federación de La Paz. En su recorrido fueron insultados por las personas, quienes los acusaron de “borrachos”.
Confederación pierde apoyo
La Confederación de Choferes de Bolivia no cuenta con el apoyo de la Federación de Santa Cruz ni de la Cámara Nacional del Transporte Pesado de Bolivia, en tanto que el paro no fue acatado por la Federación de Transporte Interprovincial de La Paz.
Enrique Martínez, presidente de la Cámara Nacional del Transporte Pesado, informó ayer que esa entidad empresarial remitió una nota a la Presidencia, para comunicar su apoyo al Ejecutivo por el Decreto 420.
Los conductores cruceños apoyan ese decreto y calificaron a los dirigentes de la Confederación como empresarios e inversionistas, por lo que no acataron el paro.
La medida tampoco fue cumplida por la Federación del Transporte Interprovincial de La Paz, que, en los hechos, negocia con el Gobierno, aunque su principal dirigente, Néstor Tarqui, informó que “apoyamos incondicionalmente a nuestros compañeros”.
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