Unidos por San Martín y con un futuro promisorio

 "Tengo la certeza de que la visita de la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, al suelo peruano en el año del Bicentenario de la Revolución de Mayo, establecerá un hito en nuestra relación, al tiempo que constituirá un aporte sustantivo al crecimiento de nuestros lazos históricos e inaugurará un nuevo capítulo en los vínculos entre la Argentina y Perú.

 Con la mirada puesta en nuestro futuro, acordaremos compromisos cuyos resultados sean el bienestar y una mejor calidad de vida para nuestros habitantes.

 Nuestra afinidad también se ha expresado a lo largo del devenir histórico: el Perú ha sido un aliado inquebrantable de nuestros reclamos sobre la Cuestión de las Islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur y sus espacios marítimos circundantes.
 A su vez, el pueblo argentino ha respondido en forma incondicional, cuando furia de la naturaleza azotó al territorio peruano.

 Es importante recordar que la civilización de los Incas ejerció su influencia hasta el territorio de nuestro actual noroeste argentino, cuya lengua, el quechua, supervive hasta el presente, en nuestro folklore, en nuestra geografía, y como lengua de uso cotidiano, en las zonas rurales de nuestra provincia de Santiago del Estero.

Posteriormente, la impronta cultural de las ciudades de Lima y de Cuzco se prolongó durante la etapa colonial y su aporte resultó esencial para el nacimiento de las expresiones de un arte mestizo que brilla en la arquitectura y las pinturas de nuestras iglesias y Catedrales de la Quebrada de Humahuaca, de la Puna, y en las provincias argentinas de Jujuy y Salta.

Estas expresiones de una cultura común sentaron las bases de una afinidad espiritual, templada en el fragor de la gesta independentista. De esta experiencia histórica, los argentinos y peruanos compartimos, como un símbolo extraordinario, la figura de nuestro Libertador Don José de San Martín.

Su hazaña resume los rasgos más nobles y heroicos del alma del Pueblo argentino. Nacido en las verdes riberas del Río Uruguay, formado en las academias militares de la Península, pero revolucionario por convicción y sentimiento, no dudó en renunciar a su prometedora carrera en el ejército español para luchar junto a sus compatriotas por la libertad de la naciente Nación Argentina. San Martín mediante su palabra, su acción de gobierno, y su genio militar, insufló a sus compatriotas el entusiasmo y el anhelo por la libertad, impulsándolos a cruzar la Cordillera de los Andes, consolidar la independencia de Chile y liberar al Virreinato del Perú de la presencia realista.

 El extraordinario derrotero de la hazaña sanmartiniana, desde su inicio en Buenos Aires hasta su culminación en la Plaza de Armas de Lima, el 28 de julio de 1821, es el nudo principal que refuerza en la conciencia colectiva de argentinos y peruanos, el sentimiento de pertenencia a la gran familia latinoamericana, con sus armonías y sus particularidades, pero asociada a un gran proyecto de integración regional común.

Sin embargo, no sólo el proceso de independencia unió al Perú con las Provincias Unidas del Río de la Plata. En la segunda mitad del siglo XIX, el sutil encanto de la pluma de la escritora argentina Juana Manuela Gorriti volcada en su epistolario con el gran autor peruano, Ricardo Palma, marcó el otro empeño por mantener y acercar los lazos intelectuales y literarios entre Lima y Buenos Aires.

 Este diálogo del espíritu, entre dos de los escritores fundacionales de nuestras letras, fue la otra dimensión en el cual el alma de ambos pueblos se expresó con una sensibilidad exquisita. De este modo, Juana Manuela Gorriti y Ricardo Palma, construyeron puentes entre dos identidades nacionales, más allá de las distancias geográficas y el devenir histórico posterior a la década de 1880. 

En este año, 2010, la República Argentina conmemora el Bicentenario de la Revolución de Mayo, acontecimiento histórico que influyó en el proceso independentista del Cono Sur. Por lo tanto, el gobierno y la sociedad argentina han decidido que esta celebración posea una verdadera dimensión continental, contribuyendo así a la construcción de nuestra unidad latinoamericana.

Perú, como país hermano, estará presente en estas festividades, en razón de los ejemplos históricos antes citados y por los vínculos duraderos en todos los órdenes de la vida sustentan el edificio de nuestra  hermandad.

Estos ejemplos históricos, en nuestro presente, adoptan un profundo significado de una vocación latinoamericana, que  nos permite avanzar más allá de la mutua simpatía hacia los nuevos desafíos, trabajando para alcanzar objetivos comunes tales como el fortalecimiento de la democracia, la cooperación en los campos de la cultura, la ciencia, la tecnología, el comercio y las inversiones; y la promoción de los derechos de los migrantes así como la búsqueda de las condiciones apropiadas para alcanzar un pleno desarrollo con equidad social.

El Perú también estará representado por los miles de hermanos peruanos que viven en nuestro país. La Argentina honrando su tradicional hospitalidad con aquellos ciudadanos de otros países que desean establecerse en su territorio para buscar un futuro mejor, implementó, desde el año 2006 el programa "Patria Grande", un plan general de regularización migratoria que benefició a miles de ciudadanos peruanos permitiéndoles regularizar su situación a fin de garantizarles su situación migratoria en condiciones de plena legalidad

Jorge Taiana
Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y
Culto de la República Argentina.