Otra vez fallos de organización

Cada vez que Estados Unidos organiza una cita internacional vuelve a ponerse en evidencia sus dificultades para que la logística salga bien. En esta ocasión ha sido durante la cumbre sobre seguridad nuclear convocada por Barack Obama, en la que muchos periodistas, algunos de ellos españoles, se han quedado sin su acreditación para acceder al centro de convenciones donde se celebra el cónclave.

Representantes de medios de comunicación como la BBC, La Voz de Galicia o la cadena Ser, por mencionar solo algunos, se han quedado sin su acreditación a pesar de que la habían solicitado con anticipación al Departamento de Estado, que esta vez se ha limitado a pedir disculpas por lo ocurrido a los informadores y les ha explicado que todo se ha debido a un problema informático.

Varias calles de la capital están cortadas al tráfico y los peatones tienen restringido el acceso en las zonas aledañas al recinto donde se está celebrando la cumbre, a menos de diez manzanas de la Casa Blanca, en el centro de Washington. Una cumbre más en la que los periodistas no podían recoger su acreditación en el centro de prensa habilitado para la reunión y que debían trasladarse para ello hasta el National Press Building.