Simancas se queda sin parada

De un plumazo o de un golpe audaz han borrado la estación del metro de Simancas de los nuevos planos que publica la Consejería de Transportes. Siempre hay una mano tonta, darle categoría de inocente es presumir demasiado.
La anécdota ha servido para que Rafael Simancas se pegue una verónica con sentido del humor, dice que nunca borrará el nombre de Aguirre y que piensa ponérselo al mayor torneo de golf regional como homenaje a la ex presidenta. Donde las dan las toman.

Cuentan que hay un pueblo al norte de Francia, un minúsculo rincón del país de Sarkozy, que fue alemán hasta Napoleón Bonaparte. Parece que cuando se trazaron las fronteras de Francia el cartógrafo no tuvo narices de pedir al emperador que levantara el dedo del mapa en el que se apoyaba. Total, todo para el convento.

Luego pontifican con la tecnología que ayuda al hombre, (cuando más bien le hace la cusqui con sus erratas de imprenta que son erratas como conejos).
Siempre se dijo que Madrid tenía mala memoria con sus difuntos, ahora comprobamos también que con sus vivos. Se aprecia un plano oficial que eleva la mentira a categoría de decreto regional.

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