Bárcenas apuesta por su reelección en Cepyme pese a las presiones de Díaz Ferrán

Durante la presentación de su candidatura ante los medios de comunicación, Bárcenas aseguró que le "agrada" que el presidente de la patronal, Gerardo Díaz Ferrán, no le apoye, ya que "sería un lastre", por los problemas empresariales que arrastran sus compañías Air Comet y Viajes Marsans.

Bárcenas presentó, acompañado por seis dirigentes,la lista de la candidatura que encabeza, "y que está formada por 25 empresarios reales, de los que pagan todos los meses las nóminas y sus cotizaciones", tras recordar que entre ellos están organizaciones como CEOPAN, Farmacia Sectorial, CECALE, CONFAES, FENEBÚS, Hostelería, Comercio, Estanqueros, Textil, Prensa Nacional Sectorial o Seguridad Nacional Sectorial.

Según denunció, Díaz Ferrán "ha utilizado todas las artimañas posibles" para boicotear su candidatura y ha sometido a múltiples presiones a las organizaciones sectoriales y territoriales para que voten la candidatura de "Unidad Empresarial", encabezada por el presidente de la confederación empresarial de Castilla y León, Jesús Terciado.

"Incluso les han pedido el voto delegado porque no se fían", aseveró, tras añadir que el propio Díaz Ferrán "está llamando a las organizaciones para que no nos reciban". Bárcenas advirtió al presidente de la patronal de que tiene "muchísimos apoyos", pero no los puede hacer públicos por "respeto" y por "miedo a las represalias".

Asimismo, dijo que, pese a estas presiones, CEPYME no tiene previsto irse de la CEOE "ni ahora ni nunca", ya que es la organización más importante de la patronal, aunque añadió que tampoco será el "felpudo", ni estará "a la orden" de Díaz Ferrán.

El actual presidente de Cepyme aseguró que cuando renueve su mandato volverá a pedir la dimisión del presidente de la patronal, tal como viene reclamando desde hace meses, porque "no puede representar a los empresarios alguien con tan mala imagen".

Sin acuerdo en la reforma laboral

Bárcenas aseguró que "es imposible que se pueda solucionar el último día" un acuerdo sobre la reforma laboral y consideró que "no merece la pena" seguir creando expectativas. Según Bárcenas, la negociación para reformar el mercado de trabajo ha llegado a un extremo en el que ya no puede haber concesiones, puesto que tanto empresarios como sindicatos "tienen un techo y un suelo".

En este sentido, mostró su pesimismo sobre la última reunión que hoy mantendrá el Gobierno con los agentes sociales y dijo que de ella no podrá salir ningún acuerdo porque "la sociedad ya no cree ni a unos ni a otros" y con 4,6 millones de parados "la gente necesita medidas".

"Ya ha pasado mucho tiempo, hemos trabajado mucho y no ha habido éxito", aseveró, tras puntualizar que espera que esta ruptura no "tense más las relaciones entre empresarios y sindicatos".