El portero Andrés Palop llevó al Sevilla a su segundo éxito en Europa, la segunda Copa de la UEFA consecutiva, al convertirse en el héroe indiscutible del equipo andaluz en la final ante el Espanyol disputada en Glasgow, en la que fabricó la mitad del primer gol y detuvo tres de los cuatro lanzamientos en la tanda de penaltis que resolvió el partido, en la que el equipo españolista rozó la gesta al remontar dos veces y haber jugado con uno menos desde el minuto 68.
El Sevilla estuvo por delante en el marcador dos veces, ambas de diez minutos, en la primera parte gracias a un gol de Adriano (m. 18) que igualó Riera (m. 28), y en la prórroga con un tanto de Kanouté (m.105) que equilibró Jonatas a cinco minutos del final (m. 115), aunque tuvo ocasiones para haber liquidado el partido mucho antes, pese a que el Espanyol también tuvo su momento y lanzó un balón al larguero con empate a uno en el marcador.
Fue una final que coronó al Sevilla y que tuvo su gran protagonista en Palop, que paró los penaltis lanzados por Luis García, Jonatas y el definitivo de Torrejón, en una tanda en la que sólo Pandiani, marcó para los blanquiazules. Kanouté, Dragutinovic y Puerta marcaron para el equipo andaluz, en el que erró Alves al lanzar alto, pero la oportunidad que concedió a los blanquiazules fue desaprovechada por Jonatas, precisamente el autor del empate.
El mítico estadio Hampden Park escocés corona al Sevilla en un año que puede ser histórico para el club de Nervión, que también aspira a la Liga y la Copa, y ya ganó la Supercopa de Europa, y condenó al Espanyol a sufrir una derrota en los penaltis por segunda vez en dos finales de una competición europea, 19 años después de drama de Leverkusen, donde se dejó remontar un 3-0 en el partido de vuelta y acabó cayendo en la fatídica tanda desde los once metros.
En Glasgow, se vio de inicio a un Sevilla ganador, un equipo que apenas concede oportunidades a su rival y que no tarda en golpear, y a un Espanyol dubitativo y precipitado, pero después los blanquiazules se sacudieron sus complejos.
Los andaluces habían salido dispuestos a arrollar, liderados en ataque por Kanouté y Luis Fabiano, aunque con la sorpresa del 'trivote' formado por Martí, Maresca y Poulsen y con Puerta en el lateral izquierdo de la defensa, y en los primeros seis minutos lograron sus dos primeras ocasiones, primero de Maresca (min. 2) tras irse con facilidad de David García y después un cabezazo de Kanouté.
Pasado el primer cuarto de hora, aguantado el primer tirón, el Espanyol, en el que Valverde reservó a Pandiani para la segunda parte y optó por Rufete, empezó a combinar algo más y Moisés (min. 17) lanzó el primer disparo a puerta de su equipo. Un minuto después, el portero volvía a ser decisivo. Si en Ucrania marcó ante el Shaktar para llegar a cuartos, esta vez fabricó el primer gol del Sevilla.
Palop atrapó un balón en un saque de esquina y sacó larguísimo con una mano, hasta campo contrario, gestando un magnífico contragolpe que sorprendió a los blanquiazules y que culminó Adriano con habilidad. Ni Luis García ni Zabaleta fueron capaces de alcanzar al brasileño en su escapada hacia Gorka, al que batió con un tiro ajustado que reafirmaba al Sevilla como gran favorito al título.
Tras el gol, además, los de Juande Ramos mantuvieron su acoso y nuevamente Puerta dispuso de un balón de gol en una acción por la banda izquierda, mientras en defensa ni siquiera dejaban a Tamudo y Luis García acercarse al área. Sin embargo, llegó la reacción del Espanyol en una jugada de Albert Riera por el carril izquierdo y con el tanto del empate, tras una gran jugada personal y con algo de fortuna en el tiro, cambió el partido.
Riera recibió el balón de De la Peña a mitad de campo y protagonizó una gran galopada hacia el área, recortó a Alves en el vértice izquierdo, buscó el disparo, frenó y finalmente lanzó desde la frontal un balón que desvió Alves y que Palop llegó a tocar sin éxito. Una vez restablecida la igualdad, el Espanyol quiso más.
De la Peña ya había empezado a cobrar protagonismo y Tamudo también comenzaba a crear problemas a Javi Navarro y Dragutinovic. El partido llegaba al descanso con un 1-1 y toda la emoción en la grada, donde también los blanquiazules habían superado el dominio inicial de los locales. En el segundo acto, Juande modificó su esquema con la entrada de Navas por Maresca, mientras que a los 10 minutos Valverde daba a entrada a Pandiani por Rufete.
EL ESPANYOL, DE UN LARGUERO PARA EL 2-1 A LA EXPULSION DE MOISES
El partido se convirtió en una gran duelo en el segundo periodo que pudo caer de cualquier bando. Tras unos primeros minutos de imprecisiones, el Sevilla tuvo algunas ocasiones, entre ellas un disparo de Kanouté que Gorka salvó con problemas, pero después llegaron los mejores momentos del Espanyol, el juego valiente de los catalanes, y también las ocasiones, una de Tamudo (min. 55) que rechazó Palop y, sobre todo, un tremendo zurdazo de Riera (min. 58) que salvaron Palop y el larguero.
El cuadro españolista no pudo entonces concretar en algo más su dominio y luego se le torció el partido. A falta de 22 minutos para los 90, Moisés Hurtado, que llevaba desde el 13 con una tarjeta, fue expulsado por doble amonestación al ver la segunda amarilla por una entrada por detrás a Kerzhakov. Con 10, el Sevilla volvió a mandar y Valverde decidió sentar a Tamudo, que se marchó a punto de romper a llorar, para colocar a Lacruz en el campo.
Con tablas en el marcador y 18 minutos de juego más, el Espanyol retiraba a uno de sus tres delanteros y se encomendaba a la entrega de sus jugadores para aguantar el arreón final de los sevillistas. Después le llegó el turno a De la Peña, al que Valverde cambió por Jonatas buscando un nuevo ritmo con el brasileño, pero por entonces todo era sufrimiento para el Espanyol, donde, una vez más, emergía la figura de Gorka.
Y llegó la prórroga. Con un jugador menos y sin Tamudo ni De la Peña, ante un rival sólido como el Sevilla, el Espanyol aguantó a duras penas, acorralado en su campo y viviendo de los errores rivales en ataque, pero justo al final de la primera parte del tiempo adicional, Kanouté no perdonó y remató a gol en el primer palo, sin dar opciones a Gorka, un gran pase raso desde la derecha de Navas que coló entre las piernas de David García.
La ventaja parecía ya definitiva, pero el Espanyol logró revivir otra vez, gracias a las intervenciones de un Gorka enorme y a un soberbio gol de Jonatas. El brasileño sorprendió a Palop con un derechazo imparable y forzó la resolución del título en la tanda de penaltis, pero el destino volvió a guardar un final cruel para el Espanyol, que despidió su participación europea sin haber perdido un solo partido.
FICHA TÉCNICA:
--RESULTADO: ESPANYOL, 2 - SEVILLA, 2 (1-1, al descanso) (1-3 en los penaltis).
ESPANYOL: Gorka; Zabaleta, Jarque, Torrejón, David García; Moisés, De la Peña (Jonatas, min. 86); Rufete (Pandiani, min. 56), Luis García, Riera; y Tamudo (Lacruz, min. 72).
SEVILLA FC: Palop; Alves, Javi Navarro, Dragutinovic, Puerta; Martí, Maresca (Navas, min. 46), Poulsen, Adriano (Renato, min. 76); Luis Fabiano (Kerzhakov, min. 64) y Kanouté.
--GOLES: 0-1, min. 18. Adriano. 1-1, min. 28. Riera. 2-1, min. 105. Kanouté. 2-2, min. 115. Jonatas.
--ÁRBITRO: Massimo Bussaca (SUI). Expulsó a Moisés por doble amonestación (min. 13 y 68) por parte del RCD Espanyol y amonestó a Luis Fabiano (min. 62) y Kanouté (min. 81) por parte del Sevilla FC.
--ESTADIO: Hampden Park de Glasgow.
Si (
No(
