Desalojado por un aviso de bomba un restaurante de Collado Villalba donde el PP celebraba un acto

En el almuerzo en el restaurante "La Vaquería" participaba también el consejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Alfredo Prada, junto a un centenar de simpatizantes y militantes del PP de Collado Villalba.

En torno a las 16.20 horas, la policía local comunicó a la organización del evento que se había recibido un aviso de bomba en dicho establecimiento, situado en la calle Fuente del Álamo, donde se celebraba un acto de partido en el que Fraga estaba presente como invitado, al estar hermanada Collado Villalba con su municipio natal, Villalba de Lugo.

Inmediatamente se personaron en lugar agentes de la Guardia Civil que procedieron al desalojo del establecimiento y pocos minutos después ordenaron a los presentes que se apartasen de la zona, al confirmarse la existencia en las cercanías de un vehículo cuya desaparición había sido anteriormente denunciada.

Agentes de la Unidad de Explosivos de la Policía (TEDAX) con perros de rastreo comprobaron si el vehículo contenía algún material explosivo, si bien la Comandancia de la Guardia Civil informó más tarde de que se trataba de una falsa alarma de bomba.

Prada condenó que alguien pueda reventar un acto democrático como es la libertad de un partido a reunirse con simpatizantes y afiliados. Según los mandatarios locales del PP, al parecer, la llamada la habría efectuado una mujer, muy nerviosa, que habría percibido la actitud extraña de algunas personas en torno a este restaurante, si bien.

Manuel Fraga, tras ser desalojado, hizo un recorrido sobre su historia política y señaló que España no puede seguir así: "no podemos seguir oyendo que ponen bombas, tenemos que ponernos de acuerdo para funcionar civilizadamente" -dijo en referencia a la amenaza terrorista- "para hacer entre todos una España en paz".

El alcalde de Collado Villalba, José Pablo González, se trasladó hasta el restaurante en el momento que tuvo noticia del suceso para acompañar a la candidata del PP, Carmen Rodríguez, y a Prada, quienes permanecían en el lugar mientras que la policía hacía las labores de rastreo.

El regidor reprobó el suceso y quiso manifestar a sus adversarios políticos su apoyo y su condena por que, en una democracia continúen produciéndose situaciones como esta.