Rajoy y Arenas apuestan por el cambio y por una ley en la que "el que gana, gobierna y el que pierde, a la oposición"

El presidente del PP, Mariano Rajoy, y su homólogo en Andalucía, Javier Arenas, destacaron la necesidad de que se produzca un "cambio" político en esta Comunidad y en España. Pero, para ello, el dirigente andaluz abogó por que haya una ley electoral con "un artículo único: el que gana, gobierna y el que pierde, a la oposición".

   Arenas, que asistió en Torrox (Málaga), junto con Rajoy a un acto de presentación de los candidatos del PP en la comarca malagueña de la Axarquía para las próximas municipales, apostó por "bajar la burocracia, terminar con el despilfarro, disminuir los impuestos y crear empleo", mientras que el Gobierno del PSOE tiende a "lo fácil", que es "bajar las inversiones, recortes sociales y subir los impuestos".

   Aseguró que "la agenda del cambio está más que preparada" y, de hecho, dijo que si gana las elecciones autonómicas, suprimiría en el primer Consejo de Gobierno el 50 por ciento de los altos cargos de la Junta de Andalucía; en el segundo, eliminaría el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, y en el tercero, pondría en marcha, como ya hay en otras comunidades autónomas, un plan de protección individual para mujeres víctimas de malos tratos.

   Asimismo, en el cuarto Consejo de Gobierno acometería la reforma de la educación porque "en los colegios hace falta más disciplina, más respeto y más responsabilidad", apuntó, y en el quinto, enviaría una ley al Parlamento de Andalucía para que "los andaluces tengamos elecciones separadas".

PRIORIDADES

   Entre las "prioridades" que se marca para los próximos meses, Arenas señaló "ayudar a nuestros compañeros en Cataluña, la segunda Comunidad más andaluza de toda España; seguir preparando las elecciones municipales, para las que el PP cuenta ya con 650 candidatos, frente al PSOE, que no sabe todavía quiénes van a ser sus candidatos en Córdoba o en Almería; volcarse en explicar la alternativa, las propuestas y las reformas", de manera que "cada día se vea al PP menos un partido de la oposición y más de gobierno", y, por último, "ayudar en la lucha contra la crisis".

   Rajoy, por su parte, se mostró seguro de que habrá "un cambio político en la Junta por primera vez en 30 años", añadiendo que el PP-A es "un extraordinario partido, liderado por uno de los dirigentes políticos más brillantes que hay en España". "El Partido Popular en Andalucía está en lo que le importa de verdad a las personas, es cercano y defiende como nadie los intereses de la Comunidad", apostilló.

   El presidente del PP afirmó que "queremos un cambio porque Andalucía lo necesita y los andaluces son mucho mejores que el Gobierno que tienen". "Treinta años después toca un cambio, la democracia también es alternancia y sobre todo cuando las cosas se pueden hacer mejor", aseveró, añadiendo que "creemos en el potencial de Andalucía y en la capacidad de los andaluces".

   Por su parte, Arenas lamentó "la gran crisis de confianza que tenemos en España en torno a los gobernantes", que son "un claro ejemplo de debilidad y de mentira". Resaltó que "en tiempos de crisis los ciudadanos no quieren a los gobernantes dedicados a cuestiones internas de partido, sino que dediquen el cien por cien de su tiempo a la sociedad".

DEBATES INTERNOS DEL PSOE

   "Frente al debate 'Trini o Tomás' --en referencia a los aspirantes en las primarias para elegir al candidato socialista a la Presidencia de la Comunidad de Madrid--, el del PP es crear empleo y riqueza y que haya confianza y oportunidades para los jóvenes", manifestó, rechazando "la nueva amenaza de subida de impuestos" y la "debilidad" mostrada por el Ejecutivo central en Melilla y Gibraltar.

   El responsable del PP-A declaró que en Andalucía "el cambio es posible" y dejó claro que "no tiene nada que ver ni con la revancha ni con el rencor ni el resentimiento, sino que se presenta a favor de toda la sociedad andaluza".

   "Un cambio que no quiere sustituir los privilegios del carné socialista con los del Partido Popular, sino que quiere que el DNI sea el único carné que sirva para tener oportunidades", defendió. Por ello, hizo un llamamiento para que el PP consiga mayoría y "podamos gobernar".

EL PP GOBERNARÁ EN LA MAYORÍA DE LOS PUBELOS DE MÁLAGA

El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha expresado su convencimiento de que su partido ganará las elecciones municipales de mayo de 2011 en la mayor parte de los municipios de la provincia de Málaga, de modo que los 'populares' gobernarán la mayoría de los ayuntamientos malagueños y, como consecuencia de ello, la Diputación Provincial.

   "El objetivo en Málaga es ganar, gobernar la Diputación y la mayoría de ayuntamientos de la provincia, y estoy seguro de que lo vamos a conseguir", afirmó Rajoy, para quien los comicios locales van a ser "más que unas municipales" y se van a convertir "en el prólogo del cambio político" en Andalucía y España, que llevará al PP "a ganar las locales, las autonómicas y después las generales".

   De cara a la primera cita electoral, el PP apuesta por volver a presentar como candidatos a los actuales alcaldes de Nerja, José Alberto Armijo; Cómpeta, José Luis Torres; Comares, Manuel Robles; y Cútar, Francisco Ruiz.

   También repetirán como candidatos Francisco Delgado Bonilla, que aspira a recuperar la Alcaldía de Vélez-Málaga que perdió en 2008 en virtud de una moción de censura; y el secretario general del PP malagueño, Francisco Salado; que también quiere volver a ser alcalde de Rincón de la Victoria, cargo que abandonó tras las municipales de 2007.

   En cuanto a las caras nuevas, el PP presentará como candidata en Algarrobo a Pilar Díaz, en Benamocarra al actual alcalde de esta localidad, Abdeslam Lucena, que ha gobernado el municipio los últimos ocho años bajo las siglas del PA; y en Torrox, tras la reciente reunificación del centro-derecha bajo las siglas 'populares', el candidato que se ha designado ha sido Óscar Medina.

   "Todos los candidatos son personas preparadas, tienen ganas, ilusión y determinación para ser alcaldes y gobernar, y tienen el aval de un gran partido y de la extraordinaria gestión de los grandes alcaldes y alcaldesas que el PP tiene en la provincia, y que ya me gustaría tenerlos en todos los municipios de España", afirmó Rajoy.

   En los mismos términos se expresó el presidente del PP-A, Javier Arenas, quien también subrayó el trabajo de los actuales alcaldes del PP en la provincia y señaló a la Axarquía como un territorio clave "que va a hacer que tengamos más alcaldes que el PSOE y la presidencia de la Diputación".

   Arenas insistió en que el PP-A tiene en los próximos comicios municipales uno de sus principales objetivos, como demuestra, a su juicio, que ya haya designado al 80 por ciento de sus candidatos a alcalde en toda Andalucía --unos 650--, "mientras el PSOE aún no sabe ni quién será su candidato en Córdoba o Almería".

   Por su parte, el presidente del PP malagueño, Elías Bendodo, también se mostró "seguro" de la victoria 'popular' en las elecciones de 2011 dado que, según manifestó, la población "ya se ha dado cuenta" de que el PSOE es incapaz de sacar a Málaga, Andalucía y España de la crisis "y de que la única forma de salir de este boquete es el PP".

   Para lograr esta victoria, Bendodo insistió en que la Axarquía, y especialmente el municipio de Torrox, "son ahora más que nunca territorios clave para que se produzca ese cambio en la provincia, que será la antesala de otro en Andalucía y España".