En una intervención leída por la vicesecretaria general del SUP,
Mónica Gracia, este sindicato policial, mayoritario en el Cuerpo, no sólo ha expresado su apoyo a las reivindicaciones de los guardias civiles, sino que ha dicho crudamente cuáles son, según ellos, los frenos que se ponen para que la Guardia Civil tenga derechos de ‘ciudadanos de primera’. Ha sido, sin duda, la más cruda de las manifestaciones de apoyo a la manifestación que 15.000 guardias civiles –según los convocantes- se han producido este sábado en Madrid.
Mónica Gracia, representando a su sindicato policial, ha dicho que “los políticos se enredan en eso de que la seguridad de los ciudadanos es una cosa y la del Estado, otra. Y la Guardia Civil sois, más que el Cuerpo de Seguridad del Estado, el Cuerpo de Seguridad del sistema monárquico. Por eso, que Su Majestad, a quien deseamos larga vida, esté atravesando un delicado estado de salud no contribuye a que los políticos y los generales busquen una solución al conflicto. Es para ellos una excusa perfecta para hablar de riesgos a medio plazo y para señalar a la Guardia Civil como cuerpo fundamental en una situación complicada como el relevo en la jefatura del Estado. Es cierto que la Guardia Civil es un cuerpo muy importante, pero también lo es que cumplirá mejor su cometido constitucional, y con más eficacia, si sus miembros ejercitan los mismos derechos que otros ciudadanos y reciben un trato digno en su profesión”.
“Viva la Asociación Unificada de Guardias Civiles”
Gracia, que finalizó su intervención con un “Viva la Asociación Unificada de Guardias Civiles”, realizó una breve reseña de lo que ha sido en democracia la lucha dentro de la Guardia Civil por alcanzar sus derechos y para cambiar los “privilegios ancestrales” de unos pocos “que no se corresponden con los usos propios de un cuerpo policial, aunque sea militar, en una democracia”. Y reveló, al respecto, que “con esa cantinela fueron [los generales] a finales de agosto [de este año] a ver al ministro del Interior, y han estado haciendo llegar ese mensaje a otras instancias superiores, que al parecer los han creído y han decidido atacar prohibiendo derechos fundamentales, con expedientes disciplinarios y pretendiendo retrocesos de derechos conquistados tras muchos años de avances”.
En ese punto, el SUP rechazó y denunció la apertura de expedientes disciplinarios a los guardias civiles y manifiesta su decisión de apoyar en todo cuanto sea necesario a los miembros de AUGC y de la Guardia Civil “porque su lucha, además de mejorar sus condiciones de trabajo y ampliar sus derechos constitucionales, es muy importante para mejorar el servicio público de seguridad que se presta a los ciudadanos”.
“No es verdad que un cuerpo militar sea más disciplinado y eficaz que un cuerpo civil”, ha dicho el SUP a través de Mónica Gracia: “Quien lo dice miente porque no puede sostener esa afirmación con datos. El Cuerpo Nacional de Policía es hoy infinitamente más eficaz que cuando era militar y también mucho más disciplinado. No hay nada que fomente más la indisciplina que la injusticia y el abuso, y eso es lo que seguís padeciendo en la guardia civil y por lo que AUGC ha dicho basta ya, por la injusticia y el abuso”.
Para el SUP, que ha rechazado las presiones desde Interior para no apoyar esta manifestación, “la interpretación restrictiva que se hace desde el Ministerio del Interior sobre la condición de un guardia civil fuera de servicio cuando se manifiesta no cabe en la Constitución. Y vosotros y nosotros hemos enterrado a muchas víctimas defendiendo esa norma fundamental, que es de las más avanzadas del mundo en reconocimiento de derechos y libertades a sus ciudadanos, para que ahora venga nadie a decir que los guardias civiles no existen como personas y que siempre son guardias civiles, soldados sin derechos ni vida civil en la que poder manifestar sus inquietudes”.
Relevo en la Jefatura del Estado
Como colofón de esta manifestación de guardias civiles en Madrid, el SUP ha arremetido contra dos grandes ausentes de la concentración: el PSOE y el PP, de los que Mónica Gracia ha dicho que no quieren una Guardia Civil desmilitarizada, y menos aún, unificada con la Policía en un nuevo y único Cuerpo de Seguridad del Estado. “Las razones que alegan son diversas pero todas fácilmente rebatibles. La coordinación, la optimización de recursos, la distribución territorial y la eficacia para mejorar la seguridad de los ciudadanos crecería de forma inversamente proporcional al descenso del coste para el erario público y los ciudadanos”.
En ese punto es en el que el SUP ha vinculado a la actual Guardia Civil con una especie de ‘garantía’ del sistema monárquico, señalando que eso les sirve de excusa a los generales “para hablar de riesgos a medio plazo y para señalar a la Guardia Civil como cuerpo fundamental en una situación complicada como el relevo en la jefatura del Estado”.
Ahora bien, el SUP dice que ellos mismos ya cruzaron “esos caminos en los que a vosotros os ponen tantos obstáculos. Tenemos la misma profesión y conocemos, por nuestro pasado militar, la ineficacia del trabajo endogámico, la asfixia cuartelera, el servilismo obligado al mando y la carencia de ningún derecho laboral, profesional o como ciudadano”. Y afirma –dirigido al ministro- que “el día que el SUP no apoye las demandas de AUGC como legítimo representante mayoritario de los guardias civiles estaremos negando nuestro propio camino y nuestra propia existencia. Sería como suicidarnos, y si, metafóricamente hablando, tenemos que morir será luchando con vosotros por conseguir esa meta que venimos persiguiendo desde hace 25 años, de una guardia civil civil, desmilitarizada y cuyos miembros gocen de plenos derechos sindicales”.
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