Animales torturados

Las leyes son un indicador  que mide la civilización de un país. Si aplicamos este principio a España, nos encontramos que, en el terreno de la protección de animales, hasta el pasado 22 de junio, para nuestro código penal, la tortura de animales era un hecho que no merecía su atención. 

Ese 22 de junio, en que por fin se aprobó la ley que va a proteger a los animales de la salvaje violencia de no pocos compatriotas nuestros, es una fecha memorable. Ese artículo 337 de nuestro código penal, que va a entrar en vigor el próximo diciembre, podrá por fin llevar ante los tribunales a los delincuentes que  vilmente  se ensañan con perros, gatos, asnos, caballos,  ciervos,  camellos  y muchas otras especies.

Se calcula que, de enero a septiembre de este año, han sido abandonados en España 150.000 animales de varias especies. Han sido abandonados, por tanto, no sólo perros, que suele ser la única especie en la que pensamos cuando se habla de animales abandonados, sino también asnos, vacas y caballos enfermos. Por tanto, en España se abandonan casi 600 animales todos los días del año.

Un año más, en Tordesillas, se ha perpetrado también,  con permiso de todas las autoridades del país, la salvaje tortura del toro de la Vega. A esta salvaje tortura, para colmo de ignominia, se la denomina, tan impropiamente, fiesta. Y, además, esa tortura tan cruenta del toro de la Vega cuenta con una vergonzosa subvención del ayuntamiento de este municipio. Esperemos que la nueva ley reduzca la violencia contra los animales.


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