Ecuador es el tercer país más desigual de América Latina

Ecuador comparte esa posición con Brasil, con un 56 por ciento de desigualdad (el 100 por ciento equivaldría al caso extremo hipotético en el que una sola persona recibiera todos los ingresos).

El representante de la ONU en Ecuador, José Manuel Hermida, indicó durante la presentación del informe que el estudio "contribuye a la formación de políticas públicas para disminuir la desigualdad".

Para Hermida, la persistencia de la desigualdad es un obstáculo para el desarrollo económico de los países.

Según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Ecuador es uno de los 15 países más desiguales del mundo, de los cuales, diez están en Latinoamérica y el Caribe, la región con mayores diferencias económicas entre sus habitantes.

A diferencia de América Central, donde la desigualdad ha bajado desde 1990, en la región andina ese índice solo ha comenzado a descender a mediados de la década actual, señala el documento.

En el caso ecuatoriano, Hermida destacó que existen avances entre 2006 y 2009, pues en este período la pobreza básica se redujo en 1,6 puntos porcentuales y la pobreza extrema en 2 puntos porcentuales, aunque recordó que el 57 por ciento de la población rural aún es pobre.

Asimismo, resaltó el aumento de inversión social en el país en los últimos años, que pasó de 1.987 millones de dólares en 2006 a 4.697 millones en 2009.

"La desigualdad no es un problema solo de los países en desarrollo, porque el problema también es de inequidad entre los países", recordó el representante de la ONU.

Para el director regional para América Latina y el Caribe del PNUD, Heraldo Muñoz, luchar contra la pobreza no basta, porque la disminución de la desigualdad va más allá y debe ser "una prioridad política" de los estados.

"Se requiere trabajar en políticas públicas. América Latina ostenta las estructuras tributarias más regresivas y una evasión de más de 50 por ciento en algunos países", dijo.

El documento se elaboró bajo tres aspectos, uno de diagnóstico, otro de análisis de políticas públicas y un tercero sobre cómo elaborar estas políticas.

El estudio revela otros datos, como el uso del tiempo de los ciudadanos ecuatorianos, que en los hombres es de 7,6 horas al día en trabajo remunerado y 2,2 horas en no remunerado, mientras que en las mujeres es de 6,7 y 4,9, respectivamente.

En educación, el informe muestra que la matriculación de niños entre 6 y 12 años de edad en 2008 fue del 97,7 por ciento y también revela que el índice de desarrollo humano subió de 0,709 en 1980 a 0,806 en 2007 en Ecuador.

Según el texto, en países como Bolivia, Colombia y Ecuador, los logros alcanzados se han visto afectados negativamente por las pérdidas económicas derivadas de fenómenos como sequías, inundaciones, lluvias intensas, deslizamientos de tierra o terremotos.

Por su parte, la ministra coordinadora de Desarrollo Social de Ecuador, Jeannette Sánchez, sostuvo que lo principal para cambiar la situación de desigualdad en el país es ver a los pobres no como beneficiarios, sino como actores, e involucrar a la ciudadanía en los procesos de cambio.

Sánchez explicó que la discriminación también influye, pues si la remuneración entre afroecuatorianos, indígenas, hombres y mujeres fuese más equitativa, Ecuador "bajaría nueve puntos en índices de pobreza y desigualdad".