Residuos vegetales contra las plagas

En agricultura, el término biocontrol puede definirse como el “el uso de organismos, o de sustancias producidas durante su crecimiento, para reducir o eliminar plagas que afecten a los cultivos”. Uno de los mecanismos más novedosos para hacer biocontrol, y con mayor proyección en el futuro, consiste en la utilización de determinadas moléculas naturales para estimular la resistencia de las plantas frente a fitopatógenos.

Investigadores del departamento de Microbiología y Parasitología de la Universidad de Alcalá, en colaboración con el departamento de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Córdoba y del Instituto de Investigaciones Agrarias Torres Torrejil, dependiente de la Junta de Andalucía, están utilizando cepas de microorganismos seleccionados –actinomicetos y hongos– para fermentar subproductos, principalmente residuos vegetales y de algas, con el fin de producir sustancias que activen la resistencia frente a fitopatógenos en plantas.

Lo que obtienen son liofilizados que contienen elicitores con los que “vacunan” a las plantas frente al ataque de hongos y bacterias. Debido a las características de los sustratos, al proceso y los microorganismos empleados, y en contraposición con los fitosanitarios químicos, los compuestos elicitores que están generando los profesores José Luis Copa Patiño y Juan Soliveri de Carranza son productos naturales compatibles con el medio ambiente.

La novedad de utilizar fermentaciones microbianas a la hora de generar nuevos elicitores se basa en que los microorganismos a emplear se caracterizan por una gran capacidad metabólica y de secreción de enzimas extracelulares, lo que  asegura que durante su crecimiento e hidrólisis de los sustratos de fermentación se van a liberar y/o generar una amplia gama de sustancias a los medios de cultivo.

Por otro lado, los subproductos y residuos que se emplean como sustratos de fermentación se escogen por ser fuentes de macromoléculas que, una vez hidrolizadas, dan lugar a compuestos elicitores, como por ejemplo: quitina, glucanos, xilanos, pectinas, proteínas, lignina, etc. Además, los sustratos son de fácil disponibilidad y bajo coste. Esto, unido a la próxima prohibición de determinados pesticidas por las nuevas normativas europeas, convierte a los nuevos elicitores naturales en una importante y ecológica herramienta para la agricultura.