Blatter adelanta la inocentada: la decisión de dar mundiales a Rusia y Qatar "no fue por dinero"

 "Hemos tomado decisiones históricas en términos de geopolítica deportiva. Hemos trasladado la Copa Mundial a nuevos territorios. La de 2018 irá a Europa del Este, a la inmensa Rusia. La de 2022 irá a Oriente Próximo, a Qatar, en el mundo árabe. La Copa Mundial va a explorar otras culturas en otras regiones, y yo sólo puedo alegrarme de ello", expresa Blatter.

Por eso, aunque dice que "sí" comprende la decepción de los candidatos no elegidos, les manda un mensaje un tanto tajante: "Pero puede que algunos quizás hayan olvidado que en el fútbol hay que aprender a ganar pero también a perder. Era una competición: unos han ganado y otros han perdido. Es normal".

Además, también lamenta las críticas de los medios. "La prensa deportiva no siempre ve la importancia social o cultural de la atribución de una Copa Mundial. Piensa en términos de penalti, córner, arbitraje o dinero. Pero insisto en lo que ya he dicho: no fue una decisión para ganar dinero", sentencia.

Así, argumenta escuda la decisión en su apuesta por ampliar fronteras. "Hay que seguir de cerca el desarrollo del fútbol y de la FIFA para comprender estas decisiones. No ha sido cuestión de un día. Fue en primer lugar Joao Havelange, mi predecesor, quien se propuso hacer del fútbol un deporte universal".

Promoción y patrocinio

"Había que promocionar el fútbol y buscar patrocinadores; en aquel entonces no teníamos ni un céntimo. Yo me adherí a pies juntillas a ese proyecto en noviembre de 1974. Enseguida vi que el fútbol representaba algo más que patear un balón. Luego, cuando fui nombrado Presidente de la FIFA, tomamos la decisión de ir a Asia. A continuación dije que había que ir a África, y es lo que hicimos. Por tanto, es normal que ahora continuemos por esa línea y nos traslademos a nuevos territorios", añade.

Por otra parte, valora el "impacto sociocultural del fútbol sobre el futuro de la sociedad". "El fútbol se ha extendido por todo el planeta. El fútbol es más que un juego, de acuerdo, pero no deja de ser un juego. Hay que aprovechar los valores positivos del fútbol, pero sobre todo hay que aprovechar la vida. Eso es lo que les diría a los seguidores del mundo entero en este fin de año", destaca.

Finalmente, define 2010 como un año de "realización", en el que ha ocurrido "algo histórico". "En primer lugar, la Copa Mundial en África, que ya de por sí es un éxito extraordinario. Las repercusiones en el mundo entero han sido fenomenales. Jamás se insistirá lo suficiente sobre las consecuencias económicas de esta prueba reina", concluyó.