Egipto y Alemania nuevamente en conflicto por reliquia antigua

Nefertiti es la reina de los museos en Berlín, misma que atrae a cientos de miles de visitantes todos los años, y aunque Egipto la quiere de vuelta, la respuesta de Berlín siempre es no.

En el Nuevo Museo que se inauguró hace poco más de 1 año en Berlín, ella es el atractivo principal de la muestra egipcia y cada vez que el director del Consejo Superior de las Antigüedades de Egipto, Zahi Hawass pide su devolución, (petición que hace cada dos meses) se topa con la misma respuesta en Berlín: los argumentos históricos y legales.

El gobierno egipcio, según comunicó en El Cairo el Ministerio de Cultura, envió la carta el 2 de enero para exigir de manera oficial la devolución del busto de Nefertiti al presidente de la Fundación Preussischer Kulturbesitz, Herman Parzinger, y el propio primer ministro egipcio, Ahmed Nazif, firmó la solicitud.

No obstante, el ministro de Cultura alemán, Bernd Neumann, negó que Egipto solicitara oficialmente la devolución de la pieza.

El portavoz del ministro explicó que la carta que se envió a la Fundación Preussischer Kulturbesitz la firmó Hawass, pero no por el primer ministro ni por ningún otro alto cargo del gobierno en El Cairo.

Por eso, explicó, Alemania considera que sigue sin haber solicitud oficial por parte del Estado egipcio.

Sin embargo, no sólo el aspecto legal es el decisivo. Los responsables en Berlín saben a ciencia cierta que para captar visitantes en el museo tienen mucho más atractivo las piezas majestuosas como el busto de Nefertiti o la puerta de Ishtar de Babilonia que las pequeñas tablas de barro o complementos hallados en las tumbas, tan importantes por otra parte para los científicos.

Es por ello, y en parte también por razones de conservación, que quieren mantenerlas a toda costa, porque saben que son la base de sus visitas.