De la economía a la comunicación por nuestra dignidad

La crisis económica internacional amenaza y la Presidenta convoca a estar unidos. Ese sentimiento de unidad se traslada a toda la región. Y con acciones concretas. Los cancilleres de la UNASUR se reunieron en Buenos Aires para evitar que sean los pueblos latinoamericanos quienes paguen una crisis que no generaron. Con este objetivo consensuaron un “escudo” para proteger a la economía de cada uno de los países a partir de tres medidas fundamentales: construir una banca regional a través de la creación del Banco del Sur; coordinar el uso de las reservas propias; e impulsar el pago en monedas locales del intercambio comercial entre los países del bloque. De este modo, la Argentina protagoniza la creación de una nueva economía que motivó los elogios del Premio Nobel Joseph Stiglitz durante una conferencia que compartió con otros 16 académicos que también recibieron esa distinción. Stiglitz cuestionó los planes de ajuste fiscal que se recetan a Europa, los mismos que en los años 90 se prescribieron por estas tierras, y advirtió que “sin crecimiento no es posible salir de la crisis. Cuanto más se demore el resultado político mayores serán la inestabilidad y los costos”. Su colega Daniel Mc Fadden expresó: “No se puede negar que a lo largo de los últimos años Argentina tuvo un muy buen desempeño. Europa tiene que ser más agresiva para enfrentar la crisis”. ¿Qué sucedió en la Argentina en estos días?. Se conoció que el desempleo bajó al 7,3 %, el nivel más bajo en 19 años. Eso se consiguió lejos de las recetas del neoliberalismo clásico y también del remozado, que por estos días insiste en enfriar la economía, mientras oculta cuántas personas de carne y hueso se quedarán sin ingresos para llevar a sus hogares producto de la pérdida de puestos de trabajo. En lugar de las reformas laborales de los 90 y de la Alianza, bien lejos de las quitas en los salarios y las jubilaciones, nuestro país sancionó la ley de movilidad jubilatoria y reestatizó los fondos que administraban las AFJP. Decisiones que garantizan la inclusión de los que habían quedado afuera, al mismo tiempo que dotan al Estado de recursos imprescindibles para tomar decisiones soberanas y enfrentar crisis como la actual. La diferencia no es menor en términos de empleo, salarios o actividad económica: se trata de pasar la crisis o de que la crisis te pase por encima. Otro rasgo central de la economía nacional es la búsqueda incesante por ampliar la base salarial. El Gobierno acaba de convocar al Consejo del Salario. Y no es una política de ocasión, en ocho años el mínimo vital y móvil creció 840 %. Esto es lo que los premios Nobel de Economía ven en Argentina y en América Latina. Mientras los parlamentos europeos avanzan en los ajustes de la zona del euro y sacrifican puestos laborales, los congresos del continente aprueban el desarrollo del Banco del Sur, cuyo destino será financiar la expansión de sus economías inclusivas y evitar los embates del capital especulativo. Por eso se reunieron en Buenos Aires los cancilleres de la región con sus pares de Asia y el Pacífico, que incluyen a Japón, China y Australia, para consensuar caminos alternativos a los transitados desde el Norte. Encuentro que no dejará de resultar paradójico si escuchamos a quienes repiten como loros que “la Argentina está aislada del mundo”, cuando en realidad dejamos de ser el mejor alumno del FMI para decidir nuestro propio destino. América Latina convive aún con muchas dificultades, pero las enfrenta con la convicción de que sólo la unión y el esfuerzo mancomunado conducen a la felicidad de sus pueblos. Integración y cooperación económica, pero también simbólica, cultural. Por eso no es casualidad que la semana próxima, en Quito, Ecuador, se reúna la Unión Latinoamericana de Agencias de Noticias (ULAN). La UNASUR de la comunicación. Argentina, Brasil, México, Venezuela, Ecuador, Cuba, Paraguay, Guatemala, Bolivia, Uruguay y El Salvador discutirán cómo profundizar la integración entre las distintas experiencias periodísticas que desde la comunicación pública crecieron en la región. Porque hacer más justa la economía, profundizar la inclusión social, exige recuperar la palabra también desde lo público. Garantizar que nuestros pueblos puedan narrar el presente, indagar sobre su pasado y proyectar un futuro en sus idiomas múltiples y desde sus realidades diversas. América Latina está recuperando la economía para ponerla al servicio del hombre. Y, al mismo tiempo, el derecho a informarse e informar. A respetar distintas opiniones y a ser respetada. A la diversidad. En definitiva, a vivir con dignidad. Sergio Fernández Novoa Presidente de ULAN y Consejo Mundial de Agencias de Noticias. Vicepresidente de Telam