Hereu, que ha comparecido ante los medios de comunicación en compañía del 'conseller' de Interior, Joan Saura, ha exigido asimismo que se esclarezcan las causas del apagón, que afectó a 300.000 personas, sobre todo de la ciudad de Barcelona, y que se aprueben las inversiones necesarias en la red eléctrica para evitar un episodio similar en el futuro.
La declaración institucional expresa el "pleno apoyo" al "malestar" expresado por los vecinos de la capital catalana, algunos de los cuales hicieron 'caceroladas', por el apagón y a la "indignación" por la dimensión de la avería.
"No aceptaremos que la ciudad pase otra noche como ésta", ha apostillado el alcalde, antes de añadir que las últimas horas han sido tranquilas desde el punto de vista de la seguridad.
Y es que las promesas de las autoridades municipales y los responsables de las compañías eléctricas, que aseguraron en la tarrde de ayer que la avería que sembró el caos en Barcelona se solucionaría en horas han sido falsas. Al menos en lo que afecta a más de 110.000 personas de varios barrios, que a primeras horas de esta mañana del martes siguen sin luz. La madrugada ha sido también caótica, aunque la situación se va normalizando.
Entretanto, unos 100.000 abonados aún no tienen luz en la ciudad de Barcelona, si bien Fecsa-Endesa ha restablecido esta madrugada el servicio a otros 30.000 clientes que dependían de la subestación de Urgell, han informado fuentes de esta empresa.
La noche del 23 al 24 de julio será recordada porque buena parte de Barcelona la ha pasado a oscuras como consecuencia de la caída esta mañana de un cable de alta tensión de Red Eléctrica que, según Fecsa-Endesa, ha causado la avería de cinco subestaciones eléctricas.Y a primeras horas de esta mañana del martes siguen los problemas.
El apagón afectó por la mañana más de 350.000 usuarios de Barcelona, l'Hospitalet de Llobregat y Esplugues, también afectó al servicio de metro y de Ferrocarriles de la Generalitat y también a numerosos comercios y servicios. Además, el 70% de los semáforos de Barcelona han llegado a quedar apagados.
Durante la noche restaron unos 110.000 usuarios sin luz eléctrica. De estos, 30.000 dependen de la subestación de Urgell ,que no está previsto que pueda dar servicio antes de este martes hacia el mediodía. La situación es todavía mucho peor en el caso de la subestación de Maragall donde 80.000 usuarios no tienen luz y dónde se cree que no se podrá restablecer el servicio en días o incluso en semanas.
Los hospitales y otras instituciones básicas están funcionando con generadores y el sesenta por ciento de los semáforos no funcionan. Los Mossos y la Guardia Urbana pusieron en marcha un servicio especial de seguridad para evitar problemas en las zonas de la ciudad dónde no hay luz.
Al anochecer en algunos barrios, principalmente en Gracia, se han oido caceroladas de vecinos indignados. Por otra parte, la normalidad fue total en la zona de la ciudad que tiene suministro eléctrico.
La Generalitat y el ayuntamiento han iniciado investigaciones sobre el origen del problema, que todo apunta a que partió de la caída de un cable en la subestación de Red Eléctrica Española en Collblanch, en L'Hospitalet. Dicha caída habría arrastrado a las estaciones de Fecsa-Endesa produciendo un efecto en cadena de consecuencias funestas.
Caos desde la mañana del lunes
Un apagón eléctrico de gran magnitud dejó a oscuras este lunes a casi toda la ciudad de Barcelona. Unos 350.000 usuarios se han visto perjudicados, incluidas viviendas, comercios, hospitales y transportes públicos. Aunque no se sabe aún el motivo, las primeras averiguaciones oficiosas hablan de la caída de un cable de alta tensión de la empresa pública Redesa, que habría arrastrado diversos transformadores. Cerca de 110.000 usuarios seguirán sin luz hasta este martes.
Unos 30.000 abonados corresponden a la subestación afectada de Urgell, que podría estar reparada este martes y que da servicio a parte de los distritos del Eixample, Les Corts, Sarrià-Sant Gervasi y Gràcia. Los otros 80.000 abonados pertenecen a la de Maragall, que todavía se desconoce cuándo podrá entrar en funcionamiento y de la que dependen usuarios de Horta Guinardó, Gràcia, Eixample, Sant Martí, Sant Andreu y una pequeña parte de Nou Barris.
El apagón se originó a las 10.53 horas en la subestación de Collblanc (L'Hospitalet) cuando cayó un cable de 110.000 kilovoltios sobre el parque de transporte de REE de 220 kilovoltios. Como consecuencia, se perdió tensión en las subestaciones de Urgell y Maragall, en la ciudad de Barcelona. El delegado de REE en Catalunya, Lluís Pinós, y el director de Relaciones Institucionales de Fecsa Endesa, Albert Alegre, explicaron a las 20.30 horas que todavía quedaban fuera de servicio las subestaciones de Urgell y Maragall, mientras que la de Collblanc estaba repuesta.
Justo dos horas después de producirse el monumental apagón se creó en la sala de emergencias que tiene el ayuntamiento de Barcelona un comité destinado a solucionar los problemas. En este grupo se integró el ministro de Industria y ex alcalde de la ciudad, Joan Clos. En rueda de prensa de valoración de la incidencia Clos descartó rotundamente que el problema eléctrico fuese fruto de un sabotaje.
A pesar de ello, el consejero de Economía del que depende el ámbito energético en Cataluña, Antoni Castells ha indicado que “se abre un expediente informativo para conocer el origen del corte de suministro”. En este sentido, ha indicado que una vez que esté resulto el problema se adoptarán las medidas que sean pertinentes y “se actuará en consecuencia”, lo que implica pedir responsabilidades a las empresas que pudieran ser declaradas responsables del apagón.
El barrio de La Florida, el más afectado
El apagón dejó sin suministro eléctrico a numerosos abonados de Barcelona, no obstante, el suministro de luz en los municipios de L'Hospitalet de Llobregat y Esplugues de Llobregat (Barcelona) estaba a mediodía restablecido por completo. Desde las 13 horas los abonados de los barrios de Can Vidalet, Centre y La Plana de Esplugues ya disponían de suministro eléctrico después de dos horas sin luz. Por su parte, en los barrios Centre, Bellvitge y Pubilla Casas de L'Hospitalet también también quedó restablecido enseguida el servicio.
La zona más afectada fue el barrio de La Florida, donde el suministro no se recuperó hasta las 14 horas. En esta zona el Hospital de la Creu Roja tuvo que funcionar con generadores eléctricos. En cuanto al servicio del Trambaix, fuentes de la empresa informaron que las líneas T1, T2 y T3 funcionaban normalmente desde las 13 horas. El corte afectó, por lo menos, desde el paseo Sant Joan hasta la parte alta de la Diagonal, más allá de la plaza Francesc Macià, y desde el barrio del Raval hasta el de la Bonanova, según testigos consultados.
La avería también afectó algunos municipios del entorno de la capital catalana. Los Bomberos de la ciudad explicaron que tuvieron que atender numerosas llamadas de emergencia por personas atrapadas en ascensores sin servicio. El apagón también provocó problemas de circulación por la avería de muchos semáforos y afectó parcialmente el servicio del Metro y de los Ferrocarriles de la Generalitat.
Reclamaciones y exigencia de mejoras
La Asociación General de Consumidores (Asgeco Confederación) aconsejó este lunes a los ciudadanos perjudicados que reclamen indemnizaciones por los cortes de luz a las compañías. Argumentaron que los afectados pueden reclamar por averías en los electrodomésticos o productos perecederos en las hojas de reclamaciones pertinentes, que deben pedir en las oficinas de las compañías.
Según la Ley para la defensa de los consumidores y usuarios, éstos tienen derecho a ser indemnizados por los daños y perjuicios demostrados. Por tanto, Asgeco Confederación aconsejó al consumidor que reclame a la compañía eléctrica aportando toda la documentación que acredite los daños y que lo comunique a su seguro de hogar.
Los clientes que quieran reclamar a las compañías podrán hacerlo en la oficina de atención al cliente de la avenida Vilanova 12 o al teléfono 900.84.73.84. Fecsa Endesa ha puesto en marcha otros dos teléfonos: 902.50.77.50 y 902.53.65.36, además de 12 puntos de servicio en Barcelona ubicados en Brunique 15, Roger de Flor 93-97, Casanova 172, Valencia 401, Sant Medir 2, Sant Gervasi 87, Segle XX 10-12, Artesanía 76, Malats 74-76 y Ramon Turró 249-251. También se puede reclamar en el cuartel de Mossos de la calle Marina 347-349.
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