Las tensas relaciones entre ZP y FG

Han mejorado en los últimos tiempos, es cierto, pero las relaciones entre Rodríguez Zapatero y Felipe González han sido muy tensas. Y aún sigue habiendo tensión. Lean esta anécdota que refleja muy bien lo que decimos: hace un par de meses, González quiso hablar con Zapatero y éste le citó en el Congreso de los Diputados. Cuando el ex presidente y ex secretario general socialista llegó al sitio señalado se encontró con que Zapatero estaba literalmente rodeado de cuatro asesores. El gesto, por supuesto, no gustó nada a González, que esperaba un cara a cara con ZP.

No deja de ser una anécdota, pero tiene su mar de fondo. Según nuestras fuentes –muy bien informadas, por cierto-, las discrepancias entre Zapatero y su antecesor en el partido y en el Gobierno han pasado por momentos de gran tensión. Por ejemplo, hemos podido saber que hubo un tiempo no lejano en que había tanta ruptura que el presidente del PSOE y de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, tuvo que mediar entre Zapatero y González en un encuentro en el Parque Nacional de Doñana. Hasta ahí llegaba el desencuentro.

Incluso ahora hay desencuentros muy evidentes. Por ejemplo, con el caso de Navarra. Felipe González es firme partidario de que el Partido Socialista de Navarra (PSN) pacte un ‘tripartito’ en la Comunidad Foral con la Nafarroa Bai de Patxi Zabaleta y le Izquierda Unida navarra de Ion Erro. Con González forman lobby algunos de la ‘vieja guardia’ socialista, como José María ‘Txiqui’ Benegas y Ramón Jáuregui, o como el actual secretario general de los socialistas vascos, Patxi López.

Sin embargo, contra esa tesis se encuentran el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, el secretario de Organización, José Blanco, y determinados personajes con mucho ascendiente en Zapatero, como el que fuera secretario de Estado de Comunicación y actual responsable de la Casa de América, Miguel Barroso. Pues bien, Zapatero se ha decantado por esta línea, con gran pesar de los ‘gonzález boys’.