La Cámara promueve la inserción laboral de la comunidad gitana

Para analizar las políticas de empleo dirigidas al pueblo gitano en la región, la Cámara se ha reunido con los dirigentes de la Federación de Asociaciones Gitanas Calí (FAC) y representantes de la consejería de Empleo y Mujer de la Comunidad de Madrid. Esta iniciativa se dirige a fomentar la inserción laboral de los colectivos más desfavorecidos. La comunidad gitana española ha mejorado su situación social y sus condiciones de vida en los últimos años. Sin embargo, continúa siendo uno de los grupos sociales que más sufren la discriminación social. Por ello, una forma clave de paliar esos procesos de exclusión es a través de la inserción laboral. 

Según un informe de la Fundación Secretariado Gitano, la población gitana es una comunidad joven, con un nivel de formación inferior al conjunto de la población, con una tasa de actividad y de empleo por encima de la media nacional, aunque también con una tasa de paro más elevada que la media. Del estudio se desprende también que la vida laboral de este colectivo es más prolongada y, como promedio, se incorporan a la actividad económica a los 16 años y se retiran a los 64, a diferencia del ciudadano medio español, que se incorpora a los 25 años y se retira a los 59. Se trata por tanto de un sector de la población con gran potencial para el mercado de trabajo.

En la región viven alrededor de 47.000 de los más de 443.000 gitanos mayores de 16 años que hay en España, según datos de la Comunidad de Madrid. La venta ambulante es la actividad mayoritaria, seguida de la compraventa de antigüedades, vehículos nuevos y usados; los oficios artesanales; y recogida de chatarra y cartonaje. Es decir, profesiones que en su mayoría resultan inviables para las nuevas generaciones o que están en desaparición. Además, son muy pocos los gitanos que acceden a la oferta de formación profesional. A esto hay que añadir la difícil situación de mujeres y jóvenes gitanos, que acceden al competitivo mercado laboral con una formación muy escasa.

Francisco Espasandín, director de Comercio y Servicios de la Cámara de Madrid, explicó durante el encuentro con los representantes de FAC y de la Comunidad de Madrid los diferentes instrumentos que la Cámara pone al servicio de la población gitana para facilitarles el acceso al mercado laboral. Entre ellos destacó la Bolsa de Empleo, un servicio de intermediación laboral. Espasandín también expuso las necesidades de empleo en ciertos sectores de la economía madrileña, como en el comercio minorista, la construcción o la hostelería, y señaló que "Madrid, como región abierta y tolerante, facilita la inserción laboral".

El director de Comercio y Servicios de la Cámara de Madrid apuntó también la opción del empleo por cuenta propia como salida profesional, "una vía de acceso al mercado laboral que no es desconocida por la comunidad gitana, ya que prácticamente la mitad de los trabajadores de este colectivo tienen un empleo por cuenta propia".

Espasandín invitó a aquellos que se decidan por montar su propio negocio a que utilicen los servicios camerales, "ya que contarán con  el apoyo y el asesoramiento de la Cámara desde los primeros pasos". Para ello, la Cámara imparte cursos gratuitos de creación de empresas, muchos de ellos dirigidos especialmente a mujeres. Y cuenta también con un Servicio de Creación y Desarrollo de Empresas que asesora a emprendedores sobre todos y cada uno de los aspectos relacionados con el desarrollo de sus proyectos empresariales.

Por su parte, la Comunidad de Madrid cuenta con un organismo llamado Mesa de Integración y Promoción del Pueblo Gitano, compuesto por representantes de la Administración autonómica, grupos parlamentarios y diversas asociaciones del colectivo gitano cuya función es promover y facilitar la participación de los ciudadanos de etnia gitana en la región, y recuperar y potenciar su cultura.