La comisión, ante Magdalena

La ministra de Fomento no insistió demasiado, a lo largo de su primera intervención leída ante la correspondiente Comisión del Congreso de los Diputados, en la herencia recibida de los ocho años de Gobierno del Partido Popular. La citó, pero se concentró en el baile de cifras y en los cuadros sinópticos. Era su táctica. Estaba en su derecho. Incluso en el de confundir a los miembro de la Comisión. A la media hora de desgranar datos, la ataraxia y el sopor se habían adueñado de la sala. Y Magdalena Álvarez seguía desgranando datos.

La ministra se estrenó explicando el por qué de su presencia: “Comparezco a petición propia para informar sobre las infraestructuras del transporte, en Cataluña”. Para afirmar luego, curándose en salud que “estamos realizando el mayor esfuerzo inversor” e hizo referencia al Plan Estratégico Infraestructuras de Transporte (PEIT), que había lanzado a bombo y platillo a los seis meses de hacerse cargo de la cartera de Fomento. Su función es la de “trabajar con celeridad y eficacia en su terminación”, contra todas las dificultades porque se trata de beneficiar a España y de que.. “parte de estos beneficios y ventajas para la sociedad catalana van a ser visibles en el corto plazo”, con la intención de “preparar a Cataluña para un futuro de progreso”.

Las cifras de inversión ferroviaria

“El Gobierno está realizando, en esta legislatura el mayor esfuerzo inversor de toda la historia: .7.850 millones de euros” afirmó la ministra. Para añadir que la inversión ejecutada: ha superado los 5.100 millones de euros, mientras que en licitación se alcanzaron los 6.000 millones de euros.

Lo que le llevó a decir que “hemos alcanzado la velocidad de crucero para el desarrollo de las infraestructuras”. Todo ello se materializa en la construcción de la red de alta velocidad y la renovación de la red convencional, en particular la que da servicio de cercanías, desarrollando el contrato programa de Adif y el convenio firmado con la Generalitat.


Incidencias ferroviarias

Tras explicar las obviedades del funcionamiento de la estación de Sants (oficialmente Barcelona Central en la terminología de Renfe a la que no aludió): Mil trenes diarios. El 80% de ellos son de cercanías; una media diaria de 200.000 pasajeros en los ferrocarriles. Y que la estación es visitada por 40.000 personas diarias, pasó a reconocer los graves inconvenientes actuales de la red. “Esta situación mejorará, sensiblemente, a finales de septiembre. Y mucho más a finales de diciembre”.

En este apartado utilizó también todos los datos que le prepararon previamente Renfe y Adif. Las incidencias se reseñan en partes internos y, por eso, la ministra Álvarez recurrió al lenguaje técnico-administrativo de los ferroviarios. Y contabilizó las incidencias derivadas de averías y de obras, señalando que los servicios de Cercanías en Barcelona contabilizan los 138 millones de viajeros anuales.

Hizo Magdalena Álvarez especial mención en la avería del CTC (Control de Tráfico Centralizado, en argot ferroviario) que estrenaba un nuevo sistema informático que se sobresaturó, con la subsiguiente reclamación a la empresa instaladora. Y se centró en “los posibles sabotajes que investiga la policía”, como los ocho incendios en las proximidades de tendidos ferroviarios, o la aparición de piedras en la vía (18 de julio), el descarrilamiento por exceso de velocidad de un convoy en El Prat (22 de julio), o los robos de cables de señalización y de la catenaria (cinco ocasiones que se investigan); o las tormentas y fallos de energía de los días 8 y 12 de este mes de agosto.

La ministra cerró este apartado afirmando que “hay una tendencia general a la disminución de incidencias en el sistema ferroviario”.


Aeropuerto del Prat

Sobre el aeropuerto que da servicio a Barcelona, Magdalena Álvarez calificó las reformas emprendidas como “la obra pública más importante que en la actualidad ha acometido el ministerio de Fomento” en la que se han comprometido 1.437 millones de euros, no en vano El Prat es “uno de los mejores aeropuertos europeos” que contabilizó 30 millones de pasajeros anuales (datos de 2006), lo que le convierte en el séptimo aeropuerto de Europa, que en este año ha pasado a registrar 64 movimientos por hora.

Para la ministra el aeropuerto del Prat es razonablemente eficiente, incluso en materia tan vidriosa (recuérdese el colapso de los días 5 y 6 de este mes de agosto) como la facturación y la manipulación de equipajes. “El Prat sólo registra -dijo Álvarez- el 25% de lo que sucede en Schiphol, Heatrow o París”.

La ministra de Fomento finalizó su intervención diciendo: “comprendo la frustración que sienten los ciudadanos de Cataluña y, por ello reitero mis disculpas”.