Los españoles creen que los políticos están implicados en corrupción y que no tratan de cumplir las promesas electorales

   La mayoría de los españoles opina que los políticos en general están relacionados con asuntos de corrupción y no cree que diputados y senadores se esfuercen por cumplir las promesas que han hecho durante la campaña electoral, según se desprende de una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

   El estudio fue realizado entre enero y marzo de este año. Ante la pregunta de cuántos políticos están implicados en cuestiones de corrupción, un 52 por ciento de los encuestados señala que bastantes o casi todos, mientras que otro 26,2 por ciento señala que lo están algunos.

   Los españoles se dividen casi en dos mitades entre los que se confiesan poco o nada interesados en la vida política (50%) y los que sin embargo sí lo están (40%). En lo que coinciden es en vincular política con corrupción y en la creencia de que diputados y senadores, cuando son elegidos para su cargo en las Cortes, no se empeñan en realizar las promesas que han hecho en la campaña electoral: el 60 por ciento asegura que no se esfuerzan en cumplirlas.

   Los españoles opinan también mayoritariamente (el 60%) que las personas como ellos no tienen "ninguna influencia" en la labor del Gobierno y que el ciudadano medio no influye en la vida política.

   Los ciudadanos relacionan igualmente a los funcionarios públicos con la corrupción, aunque en menor número que a los políticos: el 34 por ciento piensa que son bastantes o casi todos, mientras que casi la mitad de los encuestados cree que se trata de algunos o pocos funcionarios.

   El 90 por ciento de los españoles asegura sin embargo que "nunca" se ha encontrado con un funcionario público que le pidiera algún favor o soborno a cambio de un servicio. Un 3,1 por ciento de los encuestados responde que esta situación se le ha presentado "a veces".

   Es también mayoritaria (82 por ciento) la opinión de que el trato que recibe la gente de los funcionarios varía según los contactos que se tengan, aunque el 42 por ciento de los españoles añade que casi siempre o a menudo los funcionarios le tratan de manera imparcial.