lunes 17 de septiembre de 2007, 18:06h
Durán i Lleida, que pasa por representar los intereses de CiU en Madrid ha vuelto a tensar la cuerda en la coalición. Si hace un par de días afirmó que “congela” la aceptación de su nombramiento como cabeza de lista por CiU en las próximas generales hasta saber “de que va” la refundación del catalanismo que preconiza Artur Mas, ahora ha vuelto a desmarcarse de la opinión expresada por el grupo mayoritario: CDC.
El domingo pasado se celebró en Barcelona una reunión de dirigentes de CDC, BNG y el PNV. A la salida, Mas afirmó que las tres agrupaciones operaran conjuntamente en el Parlamento y el Senado para plantear alternativas al gobierno español. Bien, Duran ha hecho saber a sus socios que no está de acuerdo con esa línea de actuación. Para el dirigente democristiano los intereses de los catalanes en Madrid no pueden quedar hipotecados a una actuación coordinada con vascos y gallegos.
Por su parte la ejecutiva de CDC se ha reunido este lunes para analizar los últimos movimientos de Duran, aunque en el partido de Pujol evitan polemizar.
A recordar que el partido de Duran es el interlocutor directo con el PNV. Hasta que el grupo político vasco fue expulsado a propuesta del PP de la internacional democristiana y conservadora, ambos grupos formaban parte de dicha coordinadora internacional.