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Sobran políticos

Sobran políticos

martes 11 de octubre de 2011, 08:13h
     Se recortan puestos de trabajo, se podan cantidades de dinero del presupuesto público, se "adelgazan" estructuras, se limitan gastos, se renuncia a la construcción de tramos de carreteras, se pide austeridad en el manejo de los presupuestos, se impone una dieta de hierro en los salarios de los funcionarios, pero los políticos siguen en su jaula dorada, ajenos a la realidad, como si la crisis no fuese con ellos.

    Por eso,  sea bienvenida la propuesta del Partido Popular de eliminar al menos cincuenta diputados en el Congreso, además de senadores, diputados autonómicos, concejales, etcétera. No se trata de dinamitar los pilares del Estado democrático, sino de promover que se imponga el sentido común.
    "Sobran políticos", dice desde el PP el candidato Mariano Rajoy, y desarrolla esa idea Esteban González Pons, para quien con 300 diputados (y no los 350 actuales) se podrían cumplir las mismas tareas que se vienen llevando a cabo en las últimas legislaturas. La verdad es que la idea parece buena, aunque se quede corta... Salga usted a la calle, y pregúntele a cualquier viandante si sobran diputados, senadores,  parlamentarios autonómicos, concejales,   etcétera. La respuesta unánime de la calle sería que sí, que sobran políticos y que faltan puestos de trabajo para la economía productiva.

     Sin embargo no somos optimistas sobre esa propuesta porque nadie tira piedras contra su propio tejado, y hay muchos aspirantes a rellenar las candidaturas, y son numerosas las personas que se creen con méritos para ir durante cuatro años a Madrid, de lunes a miércoles o jueves, y bostezar en un escaño, y pulsar el botón que le manden, y no enterarse de nada, y no subir a la tribuna de oradores ni una sola vez, y sentirse satisfechos de representar a un pueblo que ni siquiera los conoce y que los vota en la obscenidad casi anónima de las listas cerradas.

    Lo que propone el PP está muy bien, e insistimos en que se queda corto. Pero ¿quién le pondrá el cascabel al gato? Si en las elecciones del 20-N el PP obtiene mayoría absoluta, que es una hipótesis entre otras muchas, ¿va a decidir sinceramente mandar a cincuenta diputados para casa? Es algo imposible y, en el mejor de los casos, habría que debatirlo, aprobarlo y dejarlo para la siguiente legislatura. Pero la intención es buena y, como propaganda, es aún mejor, aunque la experiencia nos enseña que los políticos españoles no renuncian a la poltrona propia, o a los escaños que manejan para sus amigos, ni aunque los intenten echar con agua hirviendo. Demagogias aparte, es el pueblo el que dice que sobran políticos, y son los políticos quienes, promesas oportunistas aparte, ponen en escena aquello tan viejo de que "no nos moverán".
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