XX Congreso del Partido Popular Europeo
¿Fin al silencio de Rajoy con 'la Marsellesa'?
martes 06 de diciembre de 2011, 09:46h
Varios líderes
europeos, entre ellos el Presidente del Gobierno electo español, se
reunirán en Marsella en el XX Congreso del Partido Popular Europeo
(PPE), que tendrá lugar los próximos días 7 y 8 de diciembre.
El encuentro se producirá
tras la reunión mantenida el lunes en París entre el dúo que viene
conociéndose como Merkozy, formado por la Canciller alemana,
Angela Merkel y por el Presidente francés, Nicolas
Sarkozy, y que parece llevar las riendas del futuro de toda la
Unión Europea sin que nadie lo cuestione demasiado. Los mercados
parecieron dar el visto bueno a este liderazgo, pues el lunes se
levantaron de muy buen humor en las principales bolsas europeas,
aunque esta mañana han sido algo menos optimistas tras la amenaza de
Standard & Poor's de la rebaja de la nota de varios países de
la zona Euro, incluyendo la triple A de Alemania y Francia.
Merkel y Sarkozy pactaron
ayer en París impulsar una reforma a los Tratados de la Unión
Europea, que modificará la forma de gobierno de la eurozona para
equilibrar los presupuestos nacionales y obligará a los Estados
Miembros a incluir cláusulas constitucionales que limiten el déficit
y la deuda, dando luz verde al Tribunal de Justicia de la UE para
sancionar a los países incumplidores. Para facilitar el
procedimiento, el acuerdo estaría limitado en principio a los países
de la zona Euro, pero dejando abierta la posibilidad de que se
adhieran los Estados Miembros que deseen hacerlo.
En este momento clave
para la Unión Europea, el PPE, una agrupación política que reúne
a los principales partidos europeos de centro-derecha, inaugura
mañana por la tarde su XX Congreso bajo los auspicios de la UMP
(Unión por un Movimiento Popular, el partido de Nicolas Sarkozy).
Este evento permitirá a los líderes de estos partidos discutir de
manera informal los puntos de un impulso necesario para que Europa no
se desuna.
Será la primera vez que
Mariano Rajoy se encuentre con numerosos mandatarios europeos
tras haber sido elegido Presidente del Gobierno, y aprovechará la
ocasión para manifestarles su intención de que España esté en
"primera línea" del nuevo Tratado. Allí estarán Nicolas
Sarkozy y su Primer Ministro, François Fillon; Angela
Merkel; el Primer Ministro de Polonia y presidente de turno del
Consejo Europeo, Donald Tusk y el Primer Ministro portugués,
Pedro Passos Coelho, además de Traian Basescu
(Rumanía), Viktor Orbán (Hungría), Frederik Reinfeldt
(Suecia), Enda Kenny (Irlanda), Boyko Borisov
(Bulgaria), Lawrence Gonzi (Malta) y Jyrki Katainen
(Finlandia). También asistirán los líderes de los partidos
miembros del PPE que no están en el Gobierno, entre otros el
ex-Primer Ministro italiano Silvio Berlusconi, y completan la
lista de invitados algunos jefes de Estado y de Gobierno de Estados
no miembros de la Unión Europea, como Mikheil Saakashvili
(Georgia), Vlad Filat (Moldavia) o Sali Berisha
(Albania).
Este "postre" de la
reunión parisina será a la vez el "aperitivo" del Consejo
Europeo, que reunirá a los jefes de Gobierno de los 27 Estados
Miembros los días 8 y 9 de diciembre en Bruselas, donde se decidirán
los asuntos abordados el lunes en París. Como ya se sabe, Merkozy
es quien dirige la orquesta, algo que además parece evidente nada
más ver la agenda de la semana: Alemania y Francia llegan a un
principio de acuerdo el lunes, lo celebran con un apéritif
con sus amigos el miércoles, para conocer la decisión de sus
pupilos el viernes, aunque en el caso de no recibir su beneplácito,
podría desencadenarse otra crisis de credibilidad del proyecto
europeo.
Por otra parte, éste
será el último Consejo Europeo en el que participará José Luis
Rodríguez Zapatero. El Presidente del Gobierno en funciones deja
una herencia llena de deudas al nuevo Ejecutivo, que, sin aceptarla a
beneficio de inventario, aún no ha dejado nada claro cómo va a
gestionar la crisis económica. Precisamente por ello, en España se
espera el Congreso de Marsella con especial expectación. Esta puede
ser la ocasión para que Mariano Rajoy desvele ante sus
colegas europeos cuál va a ser su receta milagrosa para sacar a
España del estancamiento económico y para detallar los pormenores
de la inminente reforma laboral, que pretende dar un importante
impulso al empleo en nuestro país, que tiene la medalla de oro de la
Unión Europea en porcentaje de paro.
Sin embargo, Rajoy
ha dejado entender que hasta que no tenga acceso a las cuentas
públicas, no le será posible revelar esta información. Esperemos
que, por lo menos, al son de la Marsellesa, dé algunas pistas.