El presidente del Sevilla FC, el letrado José María del Nido, ha confirmado que recurrirá ante el Tribunal Supremo la sentencia de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Málaga que le condena a la pena de siete años y medio de prisión y quince años de inhabilitación absoluta por el denominado caso 'Minutas', sobre las presuntas irregularidades en los encargos realizados al abogado por parte del Ayuntamiento de Marbella (Málaga).
simismo, Del Nido, en el transcurso de una rueda de prensa en la que ha estado acompañado de su representante legal, Pedro Apalategui, ha confirmado que a día de hoy su decisión es no dimitir de su cargo como presidente del club deportivo.
Apalategui ha confirmado que, a pesar de que la extensión del fallo --de 480 folios-- no le ha permitido una lectura del mismo en profundidad, sí se han "encendido algunas luces de alarma" que han propiciado la decisión de recurrir la sentencia en casación, en la confianza de que es posible tumbar el fallo de la Audiencia.
El letrado de Del Nido ha aludido a la petición por parte de la Fiscalía Anticorrupción de medidas cautelares a los acusados que han sido condenados en el caso, incidiendo en que por el momento desconoce en qué consistirán éstas --puede ir desde el pago de una fianza hasta el ingreso en prisión-- y recordando que "no basta" con la reclamación del Ministerio Público en tanto que "cuando se afecta a un derecho fundamental ello se tiene que fundir con los requisitos de la doctrina constitucional".
En este sentido, el propio presidente del Sevilla FC ha recordado la consignación, producida tiempo atrás, de una fianza de cinco millones de euros para cubrir posibles responsabilidades civiles. Por otro lado, en lo tocante a un posible riesgo de fuga, el representante legal de Del Nido ha apuntado a que "no parece que pueda existir", dado el "arraigo" del letrado sevillano a la ciudad como máximo mandatario del club nervionense.
"Creo honradamente que cualquier comentario sobre ello sería redundar en lo obvio", ha expuesto, recordando que ha sido absuelto de los presuntos delitos agregados en el transcurso de la causa, en cuyo juicio oral, que ha durado 17 meses, "ha sido precisamente Del Nido el que, salvo en una ocasión, ha permanecido a diario en las sesiones".
"INOCENTE HASTA QUE SE DEMUESTRE LO CONTRARIO" En lo tocante al ámbito de su cargo, Del Nido, visiblemente afectado por todo lo sucedido --"si dijera que ayer me quedé tan normal mentiría diez sobre diez, la bofetada fue gorda, ni en mi cabeza ni en la de mis asesores jurídicos cabía esta condena"--, ha explicado que, a pesar de que desde el punto de vista de la defensa de sus intereses personales lo más lógico sería dar un paso atrás, no ha "huido" nunca y se siente "fuerte" como para "seguir al frente de la nave sevillista", ya que la sentencia no es firme y, por tanto, es "inocente hasta que se demuestre lo contrario".
Tras asegurar que para tomar esta decisión ha hablado con "cientos" de personas --los amigos y la familia le han aconsejado que se vaya, los asesores y accionistas que se quede--, el abogado, que ha reconocido que es "una de las medidas más trascendentes que he adoptado en mi vida", ha considerado que en el balance entre los beneficios y perjuicios de abandonar la presidencia del Sevilla FC o permanecer en ella ha decidido quedarse, siempre pensando en lo que era lo mejor para la institución que dirige. "La imagen puede quedar perjudicada, pero entiendo que mi permanencia beneficiaría más a la sociedad", ha expuesto, reconociendo que "no me considero imprescindible para nada, pero creo que he sido un buen gestor".
"Creo que el ser humano está para que cuando se cae se pueda levantar, el sufrimiento va por dentro y si no estuviera convencido ni me sintiera con fuerzas me iría a casa", ha dicho Del Nido, que ha explicado que, por mor de su situación actual, "no sé si a algún acto habrá que faltar, pero me gusta hacer las cosas con intensidad".
Ha admitido que, aunque a día de hoy la decisión es "difícil" pero está tomada, no sabe si en un futuro ésta cambiará. Por el momento, ha querido lanzar un mensaje de "tranquilidad" a los sevillistas, a los que ha explicado que el club tiene estructuras "suficientemente sólidas" con las que se han soportado "sobresaltos", que lo importante del Sevilla es "su bandera y su afición" y que seguirá con "fortaleza e ilusión", sin que este "duro palo" a su vida personal afecte a su cargo.
"La querella criminal de la que nace el juicio se puso en marcha en el mejor año de la historia del Sevilla Fútbol Club, en 2006, y ahí está el balance de la gestión", ha incidido, apostillando que si le hubieran llegado desde el accionariado posicionamientos de duda "habría convocado rueda de prensa de despedida".
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