www.diariocritico.com
¡Que no nos falte de na, que no que no!

¡Que no nos falte de na, que no que no!

viernes 27 de abril de 2012, 11:40h
Vaya cutrerío de Feria, cientos, miles de paseantes por el albero del Real de Los Remedios que dan vueltas y más vueltas observamdo un cada día más pobre paseo de caballos y asomándose a unas casetas huérfanas de público y en las que los camareros más parecen aguacilillos de la Maestranza asomados a la barra-barrera a ver si algún despistado se acerca a pedirles ese ansiado plato de jamón o una cigalas de tronco que ahora se consumen de aburrimiento tras el escaparate el expositor. Decía la sevillana aquello de "¡Que no nos falte de na, que no que no!" y pasado el ecuador del festejo, en espera de la llegada de los madrileños en el puente del 1 de mayo, aún queda la esperanza de que éstos traigan algún euro en el bolsillo que anime el cotarro el fin de semana, porque este 2012 los de aquí no están para muchos gastos y para menos alegrias. ¿Saben cuáles son los platos estrella de esta Feria? Pues tres, a saber, los tomates aliñaos, las almendras fritas y las tortillas de patatas con muchos...tenedores. ¡Que no nos falte de na, que no que no! Mi ex compañero y sin embargo amigo, Alberto García Reyes recordaba en una de sus geniales crónicas feriales en ABC de Sevilla la letra de la sevillana de Manuel Melado que decía: "Mirala cara a cara que es la primera" refiriéndose a esa espléndida ración de jamón de Jabugo que antes adornaba todas las mesas y que ahora es más difícil de encontrar en la feria que a los políticos del PP. Esa "primera" de jamón, si es que aparece, es la primera y la última que vas a ver en toda la Feria, que no está el horno para jamones de pata negra y cigalas de tronco, sino para mucho rebujito a palo seco con el que retranquear el polvorín del albero reseco que más que el Real e Los Remedios te recuerda a un día de Levane en Tarifa. Y hablando de cigalas, se dice por el ferial que el ínclito concejal Antonio Rodrigo Torrijos, ese que quedó inmortalizado con la excelsa mariscada a cargo del preseupuesto de Mercasevilla, aspira a ocupar una Consejería en el nuevo Ejecutivo PSOE-IULV-CA comandado por Pepe Griñán y Diego Valderas. Se le vio muy activo en la toma de posesión del nuevo Parlamento y no me extrañaría que estuviese buscándose un carguete mejor remunerado que su actual puesto de portavoz en el Ayuntamiento hispalense. La incógnita se desvelará en una semana.

Porque esa es otra, excepto contadas ocasiones, la clase política andaluza, presente otros años a todas horas y hasta en la sopa en todas y cada una de las copas oficiales, ha renunciado a los innumerables saros y recepciones feriales optando por desaparecer del Real. Es cierto que este año se han recortado gastos y han sido muchas las organizaciones, entre ellas el Ayuntamiento, los sindicatos, varias patronales y la mayoría de los partidos, que han optado por anular sus actos festivos. Ninguno de los tres candidatos a la Presidencia de la Junta en las elecciones del 25 de marzo, ni Pepe Griñán ni Javier Arenas ni Diego Valderas, han aparecido por el recinto conscientes de que, por uno u otro motivo, las conversaciones iban a girar sobre lo que todos sabemos, que se iban a pedir muchas incómodas explicaciones y ya se sabe que con algunas copas de manzanilla de mas en el cuerpo el personal se pone de un pesado que no hay quien lo aguante. Y no está el percal, con el más de un millón de parados, con el enchironamiento del consejero Fernández, con el mitin incendiario de Sánchez Gordillo en el Parlamento, con el accidente jamonero de Valderas, con la victoria-derrota de Arenas y con lo que te rondaré morena, como para enfrascarse en discusiones políticas que a nada conducen. Ya habrá tiempo, el miércoles y el jueves de la semana que viene, para retomar la acividad política en el debate de investidura de Pepe Griñán que promete ser bastante esclarecedor de las dudas que aún flotan entre el electorado sobre el "pacto del progreso" y el sorteo de sillones en San Telmo. Pero esa es otra historia que les contaré a su debido tiempo.

En fin, lo dicho, la Feria de la gran crisis está dando sus últimas boqueadas consciente de que va a ser una de las peores de lo que llevamos de siglo. Muchos de los que pensaban que iba a ser un transitorio remedio para su ruina, sobre todo los pequeños empresarios que han alquilado los caterings de las casetas, han podido comprobar como buena parte de sus existencias se han quedado en las vitrinas en espera de un recliclado imposible. Bueno, les dejo, que va siendo hora de comer en casa para después ir a la Feria a hartarme de rebujito a palo seco porque ya saben que soy de aquellos que defienden que como en casa no se come en ningún lado. Feliz puente del Día del Trabajo para los escasos a los que aún le queda que, visto lo visto, cada día son menos. 
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
1 comentarios