Euskadi: se hunde el PSE, bajan PP y PNV y arrasa el nacionalismo radical

Al filo de las 22.10 horas comparecía el presidente del EBB del PNV y próximo lehendakari, Iñigo Urkullu, cuando había sido escrutado el 99,76 de los votos emitidos. Las urnas ya daban su veredicto final: 27 escaños para el PNV, tres menos que en las elecciones de 2009, pero con una mayoría relativa más que suficiente para que Urkullu sea próximo lehendakari vasco en sustitución del socialista Patxi López.

Así se notaba en el rosto de Urkullu, que se veía lehendakari, pero su sonrisa ocultaba una leve sombra por no haber alcanzado todo el apoyo que su nueva política soberanista reclamaba. Lo cierto es que Urkullu no tiene contrincante, porque el PSE de Patxi López se ha hundido en estas elecciones: ha obtenido 16 escaños, 9 menos que en las elecciones de 2009. Y por si fuera poco, el PP de Antonio Basagoiti ha retrocedido en tres escaños, quedándose con sólo 10. En definitiva, que la suma de PP y PSE no da la mayoría necesaria, ni mucho menos, para gobernar. Pero es que tampoco consiguen entre los dos alcanzar los 27 escaños del PNV.

El gran ascenso, aunque no sorpresa, ha sido el de los herederos de Batasuna. La candidatura de EH-Bildu encabezada por Laura Mintegi, una abertzale de izquierdas con experiencia política y electoral suficiente, ha obtenido 21 escaños y casi 280.000 votos, muchos más que los obtenía su antecesora Batasuna. Un elemento, sin duda, para la reflexión.

Finalmente, la UPyD de Rosa Díez ha conseguido mantener el escaño que logró en 2009, aunque en esta ocasión ha estado muy reñido con la candidatura de la izquierda unida vasca, que ha concurrido escindida a estos comicios.

Ahora bien, en estas elecciones vascas no cabe achacar a la abstención el hundimiento del Partido Socialista, uno de los datos más destacados junto con el ascenso 'irreparable' -dicen algunos- de EH-Bildu. En Euskadi, en 2009 votó el 64,68 % del censo, y en estas elecciones de 2012 lo ha hecho el 65,83; es decir, un 1,15 % más. Hay quien ya dice que es que los que se han movilizado son los abertzales, y que los socialistas se han quedado en su casa. Ésa será una de las incógnitas a resolver por sociólogos y politólogos en los próximos días.

Pero antes hay que resolver otros problemas más próximos que se le plantean al peneuvista Iñigo Urkullu, que gobernará en Ajuria Enea pero ¿apoyándose en quién? Con sus 27 escaños necesita 11 más para gobernar con mayoría absoluta, y sólo se lo podrían dar el PSE o EH-Bildu. Dado que con estas cuentas el popular Antonio Basagoiti queda fuera de juego [Basagoiti estaba dispuesto incluso a ofrecerle apoyo parlamentario a Urkullu con tal de que el PNV no se echara en los brazos de Bildu], ¿hacia quién se acercara el futuro lehendakari del PNV?

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