50.000 letrados, entre ejercientes y no ejercientes, el Icam es el más importante de España
Grandes figuras de la abogacía española reclaman "un cambio necesario" en el decanato del Colegio de Abogados de Madrid
miércoles 12 de diciembre de 2012, 10:05h
Escuchas ilegales, crisis en el turno de oficio, profesionales que aun
no han cobrado, recortes en el seguro médico privado... es la herencia
que deja el actual decano del Colegio, Antonio
Hernández-Gil, que se presenta a la reelección convencido de que "hay
una tendencia a sumar mandatos
largos". A una semana de las elecciones a decano del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid (Icam), el más importante de España por contar con más de 50.000 letrados, entre ejercientes y no ejercientes, las probables candidaturas no están perdiendo tiempo en una batalla que está siendo muy disputada.
Un colectivo de casi una decena de letrados han firmado un artículo, publicado en El Mundo, donde ponen de manifiesto los 'agujeros' de indefensión a los que se enfrentan los colegiados con el actual equipo de gobierno del Colegio. En este artículo, el colectivo reivindican como fundamental un Colegio que proteja a sus letrados frente a la vulneración de uno de los principios de la profesión: el secreto entre cliente y abogado.
Tuvo que ser el Supremo el que pusiera al juez Garzón en su sitio, porque el Colegio, " se quedó mudo. Más aún, le hemos visto dando la espalda a los compañeros de profesión que habían sufrido personalemnte la vulneración de ese derecho", ponen de manifiesto en dicho artículo.
Entre los firmantes del artículo se encuentran grandes profesionales del derecho del país, como son Cándido Conde-Pumpido, Javier Sáenz de Cosculluela, Rafael de Mendizabal, entre otros muchos, que están convencidos de la Candidatura de Cremades es la que el Colegio necesita, porque "España necesita una nueva Abogacía que se comprometa en los distintos debates sociales que definen el futuro de nuestro país".
Los candidatos, huesos duros de roer
Pero el decano no está sólo en estas elecciones, dos son los principales candidatos a los que se enfrenta.
La primera, la letrada Sonia Gumpert, una letrada del área de
Contencioso y socia del bufete Monereo Meyer Marinel-lo que ha impulsado
la Plataforma en Defensa de la Abogacía que cuenta con el apoyo de más
de 3.000 colegiados y que reunió 1.200 firmas de abogados ejercientes
(el voto de los ejercientes vale el doble que el de los no ejercientes)
para solicitar una Junta extraordinaria que debatiera el cambio de
seguro médico, que finalmente se aprobó.
El otro precandidato con opciones de ganar los próximos comicios es
Javier Cremades. Su candidatura no tiene un programa mejor que las
otras. "Igual es hasta peor; el papel lo aguanta todo. La diferencia es
de perfil, la confianza", recalca. Además Cremades ha eludido criticar
al actual decano del Colegio de Abogados, Antonio Hernández Gil, pero ha
señalado que "no es lo mismo un decano con perfil gris que uno que
pretende dar un impulso".
Este candidato se quedó a sólo a 340 votos de ser decano en 2007 piensa, y
lo ha expresado públicamente y en varios artículos en prensa, que el
actual decanato se equivocó al no defender el derecho de defensa
vulnerado por Garzón en la Gürtel y no exigir responsabilidad al juez,
que fue finalmente condenado por el Supremo. Gumpert también es de la
misma opinión. "Es inconcebible que el Colegio no se presentara como
acusación particular en algo que es la piedra angular de nuestra
profesión", afirma. Fuentes del sector creen que este tema "pasará
factura al actual decano en las elecciones".
Respecto a los grandes despachos, Cremades cree que prefieren un
colegio de perfil bajo "porque ellos no lo necesitan". En este sentido
reclama libertad de voto. "Sería un error lo contrario; votan los
abogados, no los despachos". Es más, Cremades asegura que las anteriores
elecciones "las ganó" José María Alonso, entonces socio de Garrigues y
hoy socio de Backer & Mckinsey.