Artur Mas aclara que no se ha echado atrás, sino que busca una consulta "acordada o tolerada" por el Estado

"Creo sinceramente que el Estado tiene una oportunidad para entender que, si la consulta en Cataluña, en cualquier caso, de alguna manera legal, se acabará haciendo, es mejor hacerla de una forma perfectamente civilizada y hasta acordada o como mínimo tolerada", ha dicho ante el Consell Nacional de CDC en Cerdanyola.

Ha recordado que todas las vías legales dependen directamente de la autorización del Estado, excepto la de la próxima ley de consultas catalana, aún no aprobada por el Parlament.

Sin embargo, ha subrayado que incluso en este caso el Ejecutivo podría tumbar la convocatoria a través de los tribunales: "Si lo hicieron con un Estatut entero aprobado por el pueblo de Cataluña, imaginad qué podrían hacer con una ley de consultas aprobada por el Parlament".


ELECCIONES PLEBISCITARIAS

Por eso, ha defendido que la celebración de unas elecciones plebiscitarias es un "instrumento legal de último recurso" para que los catalanes se pronuncien, y cuya decisión solo depende del presidente de la Generalitat.

"Aunque lo intentaremos por los marcos legales en 2014 y de manera pactada con el Estado, si se nos pone contra las cuerdas y se nos niega la voz y el voto, el presidente de la Generalitat usará un instrumento legal de último recurso, que serán las elecciones en forma de consulta", ha resumido.

Mas ha incidido en que usar los comicios como referéndum no es el mejor marco posible, pero convocar la consulta "depende de la voluntad política de dos" y, si no hay acuerdo, las elecciones son la única vía.

"El último recurso es que las elecciones catalanas, que siempre por definición son legales y que tienen un plazo máximo que es 2016, se conviertan en la consulta; si ni este fuese posible, ya estamos en un escenario radicalmente diferente en el que no quiero ni pensar", ha agregado.


EN CASTELLANO

El líder convergente ha pronunciado una parte de su discurso en castellano para dirigirse a aquellos que "en Cataluña interpretan de manera simplista y fuera de manera interesada" su discurso.

Ha defendido que el 'derecho a decidir' no es "un capricho de los nacionalistas catalanes", sino la voluntad de una amplia mayoría que apoyaron mayoritariamente a los partidos que lo defendieron en las últimas elecciones catalanas.


PRIORIZAR CRISIS Y CONSULTA

Mas ha explicado que su Ejecutivo trabaja por la consulta al mismo nivel que en la salida de la crisis económica, algo que transmitió a los altos cargos de la Administración pública con los que se reunió de forma extraordinaria el lunes: "Tiene el mismo nivel de importancia aunque no acapara el mismo debate mediático", ha puntualizado.

Así, ha desgranado que el Govern también se centra en garantizar el mantenimiento del Estado del Bienestar, estabilizar el gasto público en 2014, disminuir el paro y recuperar la confianza ciudadana en las instituciones públicas.


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