El alcalde de Lleida, Àngel Ros, ha reafirmado este miércoles su compromiso con el PSC pese a dejar su escaño en el Parlamento catalán por discrepancias con la dirección sobre la estrategia con la consulta, y ha asegurado que su labor será "más intensa si cabe" tanto al frente del Ayuntamiento como en los órganos de dirección del partido. Por otro lado, los diputados críticos del PSC Joan Ignasi Elena, Rocío Martínez-Sampere y Marina Geli no han aclarado este miércoles qué votarán en el pleno del Parlament de este jueves cuando se debata la proposición de ley para que el Congreso traspase la competencia para convocar un referéndum de autodeterminación.
"Mi compromiso con el proyecto colectivo de los socialistas continúa plenamente vigente", ha afirmado en rueda de prensa, en la cual ha insistido en que no comparte la decisión de la dirección de votar 'no' en el pleno de este jueves a la proposición de ley para que el Congreso traspase la competencia para convocar un referéndum de autodeterminación.
El dirigente socialista, que forma parte de la Ejecutiva del partido y del secretariado --núcleo duro de la dirección--, ha asegurado que su compromiso es "tan firme" como cuando empezó a militar en 1979, lo que le permite seguir defendiendo los valores del socialismo, ha dicho.
Ha explicado que su intención es volver a liderar la candidatura del PSC a la Alcaldía de Lleida en las elecciones municipales de 2015, y ha esgrimido que su condición de alcalde es uno de los argumentos que le han llevado a renunciar a su escaño.
"No es bueno que el alcalde de una capital esté polemizando con su partido", ha sostenido, y ha remarcado que su papel institucional diferenciaba su situación de la del resto de diputados del PSC críticos con la decisión de la dirección.
No ha precisado, sin embargo, si disputará la candidatura del PSC a la Presidencia de la Generalitat en unas hipotéticas primarias, y ha remarcado que para eso todavía queda mucho tiempo y que ahora debe centrarse en gobernar su ciudad.
Respeto a los críticosSobre los compañeros que sopesan romper la disciplina de voto del PSC, ha subrayado que en el partido "cabe todo el mundo" con independencia de lo que suceda en el pleno, y ha argumentado que los socialistas catalanes deben recoger toda la pluralidad de sus filas.
Ros insiste en que, de no haber renunciado al acta de diputado, este jueves hubiera optado por abstenerse en la votación, y ha defendido que esa era la posición más acorde con los orígenes del PSC y con el compromiso electoral del partido de defender un 'derecho a decidir' legal y acordado.
El socialista rechaza que se sancione a los diputados si no votan en consonancia con las directrices del Consell Nacional, y destaca que el PSC debe seguir siendo un referente de progreso social, económico y nacional catalán, tres aspectos que considera indisociables.
El alcalde ha sido arropado en la rueda de prensa --que ha asegurado no querría haber hecho nunca-- por tres concejales del PSC en Lleida y por la exconsejera y también diputada crítica
Marina Geli, con quien Ros ha deseado seguir siendo "compañeros de vida política muchos años".
Ros ha registrado en el Parlamento su renuncia al escaño este miércoles por la tarde, y la Mesa de la Cámara se reunirá este jueves antes del pleno para admitirla a trámite y facilitar que su sustituto,
Òscar Ordeig, pueda iniciar los trámites para obtener el acta de diputado cuanto antes.
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