La primera mitad de la jornada fue interrumpida por la acción de los transportistas que desde tempranas horas de la madrugada comenzaron a bloquear las carreteras, los accesos a las urbes y las calles y avenidas de las principales ciudades del país. Con esa medida el paro anunciado por el sector puede prefilarse a ser considerado un éxito, pues logró inmovilizar a gran parte de la población. En muchos lugares se ha otorgado tolerancia en las acciones laborales y suspencíon de las clases.
El autotransporte nacional lanzó hoy el primer golpe contra el Gobierno. Paralizaron los nueve departamentos y bloquearán carreteras y vías capitalinas para que el Poder Ejecutivo sienta la fuerza del sector, que esta vez, a diferencia de otras oportunidades, está respaldado por los cívicos, las prefecturas y las juntas vecinales.
“Todas las medidas que se están llevando adelante son la consencuencia de los efectos que sufre la población ante la incapacidad del Gobierno de administrar la distribución del diésel, lo que incide en la canasta familiar y en el incremento de la inflación. Por eso estamos coordinando con los sectores y la medida es una de las que se asumirán en contra del desgobierno al que nos están llevando”, explicó el secretario general de la Prefectura, Roly Aguilera.
En la misma línea, planteó la posición del autotransporte el secretario ejecutivo de la Federación 16 de Noviembre, Efraín Torrico, que afirmó que el cese de sus actividades es en rechazo al recorte del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), el alza de los carburantes y los elevados precios de la canasta familiar.
El titular del Comité Cívico de Cochabamba, Óscar Zurita, afirmó que la movilización del autotransporte era la primera pulseada de las seis regiones que estuvieron reunidas la semana pasada en Tarija y que le dieron un ultimátum al Poder Ejecutivo para que hasta mañana derogue la normativa que redistribuyó el dinero de los hidrocarburos.
“Los bochis se los vamos a hacer desde mañana”, aseguró ayer el primer vicepresidente cívico cruceño, Luis Núñez, y pidió al Gobierno que se deje de ‘chambonadas’. Por su parte, el presidente del Comité Cívico Popular, Jaime Choque, pidió que la gente salga a trabajar. Desde Palacio Quemado, diferentes autoridades gubernamentales calificaron de política la medida de presión.
Se suman los problemas
Jorge Kafka / Analista político
La situación política del país está en el inicio de un proceso de confrontación, porque al Gobierno se le están sumando varios problemas. El paro del autotransporte se debe principalmente a la reacción de los sectores que buscan frenar las acciones que les afectan el bolsillo. Sin embargo, la medida del autotransporte cuando rompe las reinvindicaciones de su sector, se convierte en política. Considerando la lógica de administración de conflictos del Gobierno, dejará que éstos se incrementen. Para ellos aún es prematuro actuar.
Un sector pequeño paraliza el país
Carlos Cordero | Analista político
Creo que este paro es una vigorosa llamada de atención que está haciendo uno de los sectores más influyentes que tiene el país, porque estamos hablando de empresarios privados pequeños que tienen la capacidad de paralizar el país. El transporte le está dando esta señal al Gobierno, respecto no sólo a la escasez de carburantes, sino también a la expresión de una protesta por diversas políticas, como la Asamblea Constituyente, la inflación y el contrabando. Además, observo que el Gobierno está preocupado por esta situación, porque está sacando propagandas para desvirtuar y evitar que la medida sea contundente, pero creo que hay una voluntad política por parte de los transportistas y de la misma ciudadanía de seguir adelante con la medida. Este es un acto de protesta social.
Más allá de esta señal política, esta acción significará una pérdida muy fuerte para la ciudadanía. Creo que la situación de reclamo se la debería hacer a través de canales, como los partidos políticos y el Parlamento, pero en la actualidad éstos están controlados por el Gobierno, por eso no le están dejando a la ciudadanía otras alternativas de expresión para que manifieste su rechazo a ciertas políticas.
Si (
No(
