¿El sindicato del crimen?

Hay semanas en las que te cuesta Dios y milagros encontrar un asunto de interés para comentarlo, y hay otras, como la actual, en las que te ves desbordado por decenas de temas que merecen no uno sino cientos de artículos de opinión. Todavía no habíamos traspasado el ecuador de la semana cuando se conocía la "Operación Cirene" que volvía a poner al descubierto una nueva trama del sindicato UGT en la falsificación de facturas con ramificacions esta vez en Sevilla, Jaén, Madrid y Alicante con otros quince detenidos, entre ellos el tesorero del sindicato durante el mandato de Manuel Pastrana, Federico Fresneda, quienes tendrán que comparecer ante el juez Juan Jesús García Vélez, para aclarar diversos enjuagues hechos por el sindicato en connivencia con algunas empresas con los que se desviaba para otros usos "particulares" el dinero que la Junta destinaba a la formación de los parados. Entre las empresas implicadas está Chavsa, sita en la Avenida de la Raza (que Monteseirín rebautizó como Las Razas por aquello de la correción política), junto al Puente de las Delicias. Como yo pasaba a menudo por la puerta de su sede camino de mi antiguo trabajo, siempre pensé que Chavsa estaba relacionada con la familia del entonces presidente de la Junta, Manuel Chaves (ya saben, Chaves Sociedad Anónima), Ahora me he enterado que no, que el acrónimo de Chavsa, dedicada al mobiliario de oficina, proviene de su dueño, Simón Chávarri. ¡Uf, menos mal! En esta ocasión el "ex" se ha salvado por los pelos.

El caso es que lo de la corrupción en la UGT andaluza alcanza ya casi los límites escandalosos de lo de la Junta con los EREs fraudulentos, en la que también está implicado el sindicato, y eso que el caso no lo está instruyendo la juez Mercedes Alaya, sino su vecino de Instrucción del número 9, García Vélez, a quien se lo cedieron para no sobrecargar más a la magistrada del Vogue. Uno está ya tan acostumbrado a estos asuntos del trinque que no se espanta de nada y ve pasar a los sindicalistas detenidos como quien oye llover. Si ya hubo quien, en las anteriores detenciones por las facturas falsas en la "Operación Heracles", dijo aquello de que la UGT era la "Unión General de Trincones", ahora se está demostrando que no estan todos los que son, pero que sí son todos los que están, a los trincones me refiero. Y claro, el personal está hartándose de que unos señores a los que los trabajadores han dado su confianza para que defiendan sus derechos se dediquen a esquilmar el dinero de los currantes, muchos de ellos en paro, en beneficio propio o en comidas, saraos, regalos, pancartas, viajes y hoteles para el sindicato. Ante esta tesitura muchos no ven la diferencia entre un sindicato de clase y el sindicato del crimen. Y eso, en las actuales circunstancias es peligroso, muy peligroso porque, aunque haya muchas personas honradas dentro de la organización sindical que fundara Pablo Iglesias,(el impresor, no el de la coleta) es fácil y demagógico el confundir el todo con la parte.La cuestión ahora, dado que la corrupción política es un asunto trasversal que parece afectar a numerosas capas y estamentos de la sociedad española, desde la banca a la política y desde las empresas a los sindicatos, es buscar a alguien que vigile al vigilante.

Y se está demostrando que ese alguien tiene que ser un juez íntegro que haya dedicado su trabajo a desenmascarar a aquellos que abusan de su poder. Por ello animo a la juez Mercedes Alaya a que abandone la magistratura y dé el salto a la política. Sin duda alguna sería una candidata con tirón. De momento ella ha sido la única, ni las urnas ni el PP de Rajoy y Juanma Moreno, capaz de obligar a que dimita un presidente de la Junta de Andalucía, Pepe Griñán, y varios de sus consejeros; ha conseguido que la todopoderosa Magdalena Álvarez, antes partía que doblá, se vea obligada a abandonar la vicepresidencia del Banco Europeo de Inversiones; ha puesto al descubierto las triquiñuelas de la UGT andaluza para financiarse ilegalmente con las facturas falsas de los cursos de formación, y tiene sobre el filo de la navaja a la mismísima gran esperanza del socialismo español, Susana Díaz. ¿Ustedes ven a alguien capaz de montar lo que ha montado esta señora en sólo tres años? Alaya for president cuanto antes aunque se afilie al Podemos de Iglesias el de la coleta..

Y un apunte más, la Junta dice que se va a personar como acusación particular contra UGT en el caso de las facturas falsas, ¿lo hará de la misma forma que en el caso de los EREs fraudulentos para conocer de primera mano la instrucción y poner las trabas pertinentes? Porque lo que es pedir que el sindicato devuelva los millones robados todavía estamos esperándolo. Por cierto, ¿alguien ha oído lo que ha dicho Cándido Méndez sobre la Operación Cirene? O yo estoy sordo o el dirigente de la UGT se ha quedado mudito.