El Eurogrupo se muestra preocupado por el estancamiento de la economía de la eurozona
Los ministros de Economía de la eurozona discutirán mañana en la reunión
informal que celebran en Milán cómo responder al estancamiento de la
economía de la eurozona, que pone en riesgo la recuperación, aunque no
se espera que adopten medidas, según han informado fuentes europeas.
A la reunión asistirá el presidente del Banco Central Europeo, Mario
Draghi, que informará a los ministros de su decisión de rebajar los
tipos de interés al mínimo histórico del 0,05% y de lanzar un programa
de compra de deuda privada para reactivar el crecimiento.
Draghi pedirá a los ministros de los países del euro que no
confíen únicamente en las medidas del BCE y que actúen para combatir el
estancamiento económico, especialmente con reformas estructurales, según
las fuentes consultadas.
La economía de la eurozona se estancó durante el segundo trimestre
del año como consecuencia de la contracción del 0,2% de Alemania e
Italia y de la parálisis en Francia, mientras que sólo España y Holanda,
entre los grandes países, lograron una mayor expansión con avances del
0,6% y del 0,5%, respectivamente. Además, la inflación se moderó en
agosto hasta el 0,3%, su nivel más bajo desde 2009.
Pese a ello, los países de la eurozona siguen enfrentados sobre
las medidas que deberían adoptarse para combatir el riesgo de deflación y
una nueva caída en la recesión. Italia y Francia reclaman más
flexibilidad en el Pacto de Estabilidad para relajar la disciplina
fiscal, mientras que Alemania, la Comisión o el presidente del
Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, sostienen que ya hay suficiente
flexibilidad y reclaman más reformas.
Al mismo tiempo, el presidente designado de la Comisión,
Jean-Claude Juncker, ha anunciado su intención de poner en marcha un
plan de inversiones a escala europea de 300.000 millones de euros, que
debería aprobarse como muy tarde en febrero. Y Polonia sostiene que para
ser realmente eficaz, el plan debería aumentarse hasta 700.000 millones
de euros.
Los ministros de Economía de la eurozona aprobarán además una
serie de principios comunes sobre cómo reducir la carga fiscal sobre el
trabajo, que es "muy alta" en la mayoría de Estados miembros, para
favorecer la creación de empleo y cómo compensar la pérdida de ingresos.
En el caso de España, Bruselas ha pedido disminuir las cotizaciones
sociales, especialmente en los empleos con salarios más bajos, y
aumentar el IVA y los impuestos medioambientales. Pero el Gobierno de
Mariano Rajoy ha decidido desoír esta recomendación.
El Eurogrupo examinará también la situación en Grecia, que en las
próximas semanas iniciará las negociaciones con la troika para reducir
la carga de su deuda y pactar si es necesario o no un tercer rescate.
Además, bloqueará previsiblemente un tramo de 436 millones de euros del
rescate a Chipre por considerar que la ley sobre desahucios aprobada por
su parlamento no responde a lo pactado con los acreedores.
Finalmente, los ministros abordarán la petición de Irlanda de
devolver por anticipado parte de los préstamos obtenidos del Fondo
Monetario Internacional (FMI) en el marco del rescate de 85.000 millones
concedido en 2010. Dublín lo ha solicitado porque ahora puede obtener
financiación más barata en el mercado y los países de la eurozona están
de acuerdo, pero la decisión todavía debe ser ratificada por varios
parlamentos nacionales, según las fuentes consultadas.