Con las elecciones a la vista en apenas dos semanas y las encuestas presionando a los partidos, sus principales candidatos hablaron de los posibles e inevitables pactos tras las urnas. Las quinielas de los pactos postelectorales están en todo lo alto aunque esos jugadores de la mesa, Rajoy, Sánchez, Rivera e Iglesias, no quieren mostrar su cartas todavía y mantienen vivas todas las combinaciones de acuerdos.
Lógicamente, el más abierto a pactos fue el candidato del PSOE, Pedro Sánchez, que si bien no dio alas al posible "tripartito" (PSOE+C's+Podemos), admite que no se cierra a dialogar con los otros partidos. "El único cambio posible viene de la mano del PSOE, porque somos los únicos que lo pueden garantizar. A partir de ahí, yo haré todo lo contrario a lo que ha hecho el PP. Y es tender la mano a todas las fuerzas políticas para hacer frente a los principales desafíos que tiene nuestro país y que van a necesitar del consenso, del acuerdo…", destacó Sánchez.
Sin embargo, desde Andalucía le presiona Susana Díaz, quien se habría manifestado partidaria de que "quien gane debe ser el que gobierne", lo que el diario ABC, que destaca esta información en titulares, entiende como una "enmienda" a Sánchez. Formaría parte de un acuerdo que, muchos creen que existe, entre Rajoy y Díaz, por lo que se permitió gobernar en Andalucía al PSOE en las anteriores autonómicas a cambio de siempre respetar a la lista más votada entre PP y PSOE para mantener el bipartidismo.
Por su parte, Rajoy dijo en el Congreso, durante los actos del Día de la Constitución, que no quería tener que recurrir a los pactos postelectorales, siempre que se ganen las elecciones por más del 30% de los votos. El escenario, según reconoció, está abierto. No obstante, manifestó que renunciará a sumar apoyos si no consigue la victoria en las elecciones. "Creo que a estas alturas haya quien esté planteando un acuerdo de tres fuerzas políticas para desbancar a otra que podía ser la primera fuerza política, creo que es un error y no me parece precisamente muy ajustado a los parámetros democráticos. En cualquier caso, la gente, los españoles, deben tener en cuenta los mensajes que algunos les están mandando. Yo digo que si no gano las elecciones, yo no formaré gobierno".
Los nuevos partidos
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, insistió en el Congreso en que no pactará "ni con Sánchez ni con Rajoy", por mucho que muchas quinielas le apuntan pactando con el PSOE como en Andalucía, aunque sea parcialmente. Además, añadió, qie si queda segundo se mantendrá "como líder de la oposición". Sin embargo, se mostró convencido de que su partido quedará por encima del PSOE. "Necesitamos que tanto el PP como el PSOE, que representan al bipartidismo en decadencia, se vayan a la oposición", aseguró, después de recalcar que el país no necesita un Gobierno a base de "brochazos rojos y azules".
Pablo Iglesias, el líder de Podemos, también habló de estos posibles pactos: descartó que necesariamente tenga que gobernar la lista más votada tras el 20-D, al considerar que el sistema político español es parlamentario y no presidencialista, por lo que lo que realmente cuenta es el número de apoyos.
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