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Podemos desiste y registra un grupo confederal en el Congreso con sus aliados

> Los 4 diputados de Compromís se descuelgan e intentan agotar la vía legal para crear grupo propio

martes 19 de enero de 2016, 18:19h
La formación de Pablo Iglesias renuncia a continuar con la batalla por los 4 grupos parlamentarios. Podemos ha apurado hasta el límite legal para registrar en el Congreso de los Diputados la solicitud de un grupo confederal, justo después de reunirse con Compromís-Podemos, En Comú Podem y En Marea. Sin embargo, 4 de los 9 diputados de la coalición valenciana se han separado de este acuerdo y han registrado un grupo propio, que previsiblemente será negado por la Mesa del Congreso. Errejón, que será portavoz principal del grupo de Podemos, ha asegurado que la negativa del PSOE a concederles los 4 grupos no significa que dejen de tener "la mano tendida", pero ha criticado los motivos de los socialistas.
Íñigo Errejón junto a la portavoz de En Marea, Alexandra Fernández, y el del En Comú Podem, Xavier Domènech
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Íñigo Errejón junto a la portavoz de En Marea, Alexandra Fernández, y el del En Comú Podem, Xavier Domènech (Foto: Dani Gago (Podemos))

Podemos y sus aliados territoriales han acudido al registro del Congreso cinco minutos antes de que cerrara y acabara el plazo legal para registrar grupo parlamentario. "Habíamos dicho que iba a ser una legislatura intensa y de emociones y hemos comenzado cumpliendo", ha bromeado Íñigo Errejón.

Tras un intenso y largo debate interno, la formación de Pablo Iglesias ha decidido registar un grupo "plurinacional" con los diputados catalanes de En Comú Podem, los gallegos de En Marea y 5 de los 9 integrantes de la coalición valenciana de Compromís-Podemos, pero sólo los adscritos o cercanos a la formación morada.

Por tanto, los 4 diputados de la formación de Mónica Oltra -2 del Bloc y 2 de Iniciativa del Poble Valencià- se han desligado del acuerdo y han solicitado la creación de un grupo propio. El portavoz, Joan Baldoví, ha recordado que esta era una cláusula firmada con Podemos y que van a intentar llegar hasta el final del recorrido legal. Sin embargo, no ha querido adelantar qué harían si la Mesa les deniega el grupo, ya que entonces podrían elegir entre irse al grupo mixto o al grupo de Podemos.

Errejón, que será el nuevo portavoz del grupo morado, ha anunciado que el bloque de Podemos incuirá 3 "agrupaciones": la de En Comú Podem, liderada por Xavier Domènech; la de En Marea, cuya primera presidenta será Alexandra Fernández y la agrupación valenciana, liderada por Ángela Ballester. Estos tres dirigentes serán portavoces adjuntos junto con Irene Montero, mientras que Pablo Iglesias figura como presidente del grupo denominado finalmente "Podemos-En Comú-En Marea".

Además, el número dos de Podemos ha especificado que los subgrupos tendrán "autonomía política", es decir, que tendrán voz, agenda y recursos propios. Cuestionado por si esto incluye el sentido de los votos, han aclarado que sí -lo que implica que tendrán capacidad negociadora propia ante el debate de investidura-, aunque Errejón ha asegurado que no se le ocurre ninguna votación en la que los aliados vayan a discrepar en cuanto a su postura.

Poca "altura de Estado"

Errejón ha comparecido junto a Fernández y Domènech tras presentar la solicitud en una rueda de prensa que también ha servido para manifestar su desencanto ante la negativa del resto de partidos de concederles los 4 grupos parlamentarios.

"Nos hubiera gustado que la Mesa del Congreso hubiera tenido más altura de estado, nosotros sí la hemos tenido", ha defendido Errejón.

Además, han desvelado que hasta el último momento se ha intentado conseguir este objetivo y han dejado caer que este mismo martes han tenido conversaciones con otros partidos, aunque Errejón ha justificado el hecho de que no haya transcendido en que eran "contactos informales".

El dirigente de Podemos ha aseverado además que este encontronazo respecto a los grupos parlamentarios no implica que vayan a dejar de tener "la mano tendida" hacia el PSOE. "Pero nos hace algo escépticos", ha añadido Errejón, que ha criticado que los socialistas han elegido hasta el momento "blindar lo de siempre".

Respecto a la escisión de los 4 diputados de Compromís, Errejón ha especificado que respeta la decisón y que tendrán "los brazos abiertos" si finalmente Baldoví y sus compañeros deciden integrarse en el grupo morado.

Por otra parte, el portavoz también ha negado que se hubiera planteado que los dos diputados de Unidad Popular-IU votaran a favor de Carolina Bescansa para la presidencia del Congreso a cambio de que les ayudaran a formar grupo. Errejón ha explicado que se hicieron "sendos ofrecimientos", pero que no estaban relacionados. La formación de Iglesias llegó a ofrecer un préstamo de diputados a Alberto Garzón, algo que el diputado de IU conideró "ilegal" y tras lo cual confirmó que había llegado a un acuerdo con ERC.

Un pulso contra el PSOE

Podemos afirma que hasta el último momento se ha contemplado pedir los 4 grupos, aunque luego tuvieran que presentar un recurso ante la previsible negativa de la Mesa del Congreso. Sin embargo, finalmente se ha renunciado a esta opción y se ha optado por el 'plan b', es decir, por un grupo confederal.

La conformación de los 4 grupos fue un elemento pactado ya antes de la campaña, cuando Podemos cerró los acuerdos electorales con los aliados territoriales. Sin embargo, después del 20-D y ante la negativa continuada del PSOE, Podemos comenzó a fraguar un plan alternativo, aunque públicamente aseguraban que "no se contemplaba otra opción distinta a los 4 grupos".

La batalla por esta división parlamentaria se convirtió en un pulso con el PSOE en el que Iglesias llegó a decir que si no les concedían esta petición, sería "muy complicado" llegar a acuerdos superiores, en referencia a las negociaciones para formar Gobierno. Un ultimátum que posteriormente fue matizado por Íñigo Errejón mediante un llamamiento a los socialistas a seguir dialogando, como ha repetido este martes.

Sin embargo, el líder de Podemos acabó reconociendo que contemplaban la opción de un "grupos confederal", es decir, que técnicamente se configuraran como un sólo grupo pero que funcionarán como varias voces, opción que por la que han optado finalmente ante la constante negativa del resto de partidos representados en la Mesa.

Sobre la mesa también estuvo la opción de que las confluencias conformaran ellas solas un grupo propio (con o sin la presencia de los dos diputados de Unidad Popular-IU) e incluso se llegó a insinuar que Compromís podría separarse e ir al Grupo Mixto.

Discrepancias en Compromís

Precisamente, entre los motivos por los que Podemos ha tardado tanto en cerrar los detalles de su grupo, ha estado la discrepancia surgida entre algunos miembros de la coalición valenciana Compromís.

Uno de los partidos que integran la confluencia valenciana, el Bloc -representado por los diputados Joan Baldoví y Marta Sorli- ha instado este mismo martes a "llegar hasta las últimas consecuencias legales" en la petición de grupo propio.

En un comunicado oficial, instan a sus compañeros de Compromís a no desistir del grupo propio aunque eso implique presentar un recurso constitucional. Esta es la postura por la que se han decantado finalmente los diputados de Compromís, dejando en una delicada situación a los diputados valencianos pertenecientes a Podemos.

A última hora de la tarde, la cuenta de Twitter de Compromís publicó un documento que incluía a los 9 diputados de la coalición, y que borró a los pocos minutos. La formación valenciana ha justificado que ese era el documento previsto hasta este mismo lunes. La división ha sido la solución inevitable en esta coalición de coaliciones, aunque desde Podemos siguen esperanzados de que los 4 diputados de Compromís acaben integrándose en el grupo morado.

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