Los diez más influyentes

1.- Ricardo Blázquez Pérez, nacido en 1942 en Villanueva del Campillo (Ávila), es discreto e introvertido, enemigo de enfrentamientos directos, pero tenaz en defensa de sus ideas, y sus virtudes serían paciencia y capacidad de diálogo, aunque su signo zodiacal es Aries, signo de fuego y peleón. Llevaba siendo obispo de Bilbao una década cuando la asamblea plenaria de la CEE le nombró presidente, sustituyendo al Cardenal Rouco. Unos le tienen por pusilánime, otros por eficaz en condiciones adversas.

En  Bilbao fue recibido con muchas críticas por los nacionalistas, pero su participación en una nota pastoral en contra de la Ley de Partidos que ilegalizaba a Batasuna, le puso enfrente del Partido Popular. Y junto a los otros obispos vascos se opuso al documento episcopal 'Valoración moral del terrorismo en España, causas y consecuencias'.

Fue con anterioridad obispo auxiliar de Santiago de Compostela y obispo de Palencia. Doctor en Teología por la Universidad Gregoriana de Roma. Gran Canciller de la Universidad Pontificia de Salamanca. Miembro de la comisión para la Doctrina de la Fe desde 1988 hasta 1993, de Liturgia desde 1990 hasta 1993, y de Relaciones Interconfesionales de 2002 a 2005. Está en la delegación española de la revista teológica 'ratzingeriana' 'Communio'.

Durante todo su mandato ha servido de referencia a los sectores católicos progresistas, a pesar de que siempre ha sido tímido y huidizo en cualquier tema polémico y había que buscar con lupa alguna frase de la que sacar punta. El día 30 de diciembre estuvo al frente del acto de Madrid, y aunque acostumbrado a contemporizar con el poder, es conservador absoluto.

Aunque se le ha querido convertir en líder de una presunta alianza socialdemócrata-nacionalista en la CEE, a lo más que ha llegado en la polémica última con el gobierno es a pedir a los sacerdotes que lleven con dignidad las dificultades que encuentran en su misión apostólica -la frialdad y el desinterés en relación a la vivencia religiosa, y la debilidad institucional y la fragilidad de la Iglesia en la sociedad actual- 'sin echar las culpas a derechas o izquierdas'.  El presidente Rodríguez Zapatero le ha felicitado públicamente por ello. Y no por casualidad escogió Barcelona, diócesis que no se sumó al Encuentro de la Familia del pasado domingo en Madrid al igual que los demás obispos catalanes y vascos. Es enemigo de planteamientos polémicos, pero ha estado cinco años en la comisión de Doctrina de la Fe de la CEE.

2.- Antonio Cañizares Llovera, nacido en 1945 en Utiel (Valencia), es Cardenal, Primado de España y Arzobispo de Toledo. Perdió la presidencia frente a Blázquez por sólo tres votos, y es el actual vicepresidente de la CEE. Le gusta la polémica aunque su signo zodiacal es Libra. Por eso quizás se ha demostrado buen negociador. Tiene una agenda bien apretada con 230 parroquias a su cargo y muchas intervenciones públicas a lo largo de todo el año. Y es un político avezado, capaz de incumplir sus compromisos con toda tranquilidad, y que tiene en el fondo miedo al diálogo abierto sin púlpito por medio. Más papista que el Papa, es suave de formas, pequeño de estatura, risueño de semblante pero bien fortachón de ánimo, como para cargar con más vilipendios y odios que ninguno de sus colegas. Dicen que admira a Isabel La Católica.

Le ha tocado desde 2004 representar la defensa estricta de la ortodoxia, y lo ha hecho lo mejor que sabe. Ahora parece haberle llegado el relevo. Conocido como ‘el Pequeño Ratzinger’, por su biografía y perfil similares, incluidas las acusaciones de haberse convertido de progresista en conservador a cambio de medrar en el organigrama.  Se le considera cercano a los Legionarios de Cristo.

Podemos resumir su trayectoria diciendo que ha sido un sacerdote volcado a la docencia, con alguna experiencia parroquial en Valencia y Madrid; enseguida obispo desde los 47 años; de siempre en la organización de la CEE, y durante las dos últimas décadas, guardián de la fe. Y ahora miembro de dos departamentos vaticanos importantes, Congregación de la Fe y Pontificia Comisión Ecclesia Dei.

Es el más controvertido de los obispos españoles.Teólogo en Catequesis. Como obispo, cinco años en Ávila, otro tanto en Granada y lo mismo en Toledo, de donde es Arzobispo desde 2002.

Es el quinto más joven de los 190 cardenales actuales. Siempre hay rumores de que van a destinarle a la Curia romana. Algunos incondicionales creen que puede llegar a Papa.

3.- Antonio María Rouco Valera, nacido en 1936 en Villalba (Lugo), es cardenal desde 1998, arzobispo de Madrid desde 1995, y fue presidente de la CEE desde 1999 a 2005, año en que se quedó tan sólo a un voto de volver a ser elegido por tercera vez consecutiva. Necesitaba dos tercios de los votos para ello y su sucesor sólo mayoría simple según los estatutos. Así que perdió con más votos que el ganador. Está extendido el rumor de que el voto que cambio de lado procedía del prelado Carmelo Borobia.

1'67 de estatura, 75 kilos de peso y nariz prominente, En un tiempo no lejano fue considerado seriamente ‘papable’, aspirante a la sucesión de Wojtyla. La visita de Juan Pablo II a Madrid en la primavera de 2003 fue un notable espaldarazo. Oficiar la ceremonia de enlace matrimonial del heredero de la Corona de España en mayo de 2004, una oportunidad mediática al alcance de muy pocos. Pero perdió por un voto su tercera reelección. Su calidad de papable se vino abajo en el cónclave de 2005, y una grave enfermedad se abatió sobre su persona. Su tiempo parecía definitivamente periclitado. Su colega Antonio Cañizares cogía el timón del conservadurismo interna y externamente.

Rouco estaba hace un año enfermo, apartado y triste. Hoy da la vuelta al ruedo con todos los trofeos en la mano, y hasta sus enemigos magnifican su poder e influencia. Menudo de aspecto (1'67 metros, 75 kilos de peso) pero de fuerte carácter, se recuperó y lo hizo insistiendo en sus principios. Los que le dieron por desautorizado en Valencia por el Papa, ahora reconocen que tiene uno de los pocos hilos directos con Su Santidad. Los que le dieron por humillado en su diócesis de Madrid, vieron como su alter ego, el jesuita Martínez Camino, era nombrado obispo auxiliar suyo contra el viento y la marea de sus críticos. Han mejorado sus homilías, vuelve al primer plano. Y tal como están las cosas, podría hacerlo también a la presidencia de la Conferencia Episcopal Española (CEE).

Se le considera cercano al Camino Neocatecumenal. Sus adversarios han comenzado a compararlo con el Papa Borgia, un auténtico piropo en nuestra modesta opinión.

Su madre murió cuando tenía ocho años, a los diez entró en el seminario. Teólogo, alumno de Joseph Ratzinger en Munich, un amigo de toda la vida con quien comparte en alemán su preocupación por la pureza doctrinal y las normas del Derecho Canónico. De la mano del cardenal Suquía fue ascendiendo en el escalafón hasta llegar a arzobispo de Santiago primero y de Madrid después siguiendo sus pasos. En la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Española desde 1984, y en el Comité Ejecutivo desde 1993. Y comienza su proyección europea participando en los Simposios de Obispos Europeos de 1985 y 1989. Fue Relator General de la IX Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos en 1994. También del segundo sínodo europeo en 1999, donde su sombría presentación de la cultura contemporánea no gustó a los popes liberales europeos.

Tiene el mérito o el baldón de haber iniciado el giro conservador de la iglesia española después de años de vaivenes. Es miembro de dos Congregaciones de la Curia, la del Clero y la de los Obispos, así como de dos consejos, el Pontificio para la Interpretación de los Textos Legislativos y el Pontificio de Cultura. Y forma parte de la Prefectura de Asuntos Económicos de la Santa Sede.

Rouco habla seis idiomas incluido el latín. Representa el post-taranconismo, se lleva bien sin exagerar con el Opus Dei. Y está en la terna del máximo poder e influencia episcopal española, con su sucesor Blázquez y su alter ego Cañizares.

4.- Carlos Amigo Vallejo, nació en 1934 en Medina de Rioseco (Valladolid), arzobispo de Sevilla desde 1982, cardenal desde 2003, lo que supone automáticamente pertenecer al Consejo de la Presidencia de la CEE. Considerado el contrapunto de Rouco. Hace unos años dijo comprender que puede haber otros tipos de familia que la basada en una pareja hombre-mujer.

Carácter afable y grandes dotes de comunicación son cualidades que se le atribuyen. Estudió Filosofía en Roma y Psicología en Madrid. Pertenece a la Orden de los Franciscanos, es Hijo Predilecto de Andalucía, y el hombre que consiguió que se establecieran relaciones diplomáticas entre la Santa Sede y Marruecos como arzobispo de Tánger, cargo que ocupó casi una década. El 18 de marzo de 1995 ofició la boda de la Infanta Elena con Jaime Marichalar en la catedral de Sevilla.

Publica libros regularmente. Ha presidido comisiones diversas de la CEE desde 1982, pero sólo había llegado al comité ejecutivo una vez anteriormente, durante los años ochenta.

Actualmente en la Curia vaticana es miembro del Pontificio Consejo para los Operadores Sanitarios y de la Pontificia Comisión para América Latina.

Es la única autoridad católica que ha participado en el primer foro de la Alianza de Civilizaciones, celebrado en Madrid en estos días. Intervino en la sesión de trabajo sobre el papel de los líderes y comunidades religiosas en la promoción de una seguridad compartida.

5.- Ricardo María Carles Gordó, nacido en 1926 en Valencia, cardenal desde 1994, arzobispo de Barcelona de 1990 a 2004, tras 21 años como obispo de Tortosa. Fue sustituido al frente de la archidiócesis por Lluís Martínez Sistach casi tres años después de su renuncia por motivos de edad. 

En esta década y media al frente del clero catalán reorganizó la diócesis en cuatro zonas episcopales y gracias a una concesión especial del Papa, Barcelona participa en el concilio provincial de Tarragona de 1995, que marca un hito en la iglesia catalana.

Su retiro a un palacete modernista barcelonés, despertó protestas por considerarlo demasiado ostentoso. Licenciado en Derecho Canónico. En 1995 se incorporó al consejo cardenalicio para el estudio de los Problemas Organizativos y Económicos de la Santa Sede. 

Su discreción está avalada por lo poquísimo que se sabe de él y lo difícil de catalogar que resulta. Su biografía oficial dicen que le preocupa sobremanera las vocaciones y los seminarios. Uno de sus libros, 'Fe y Cultura', señala una de sus especialidades; la otra es el uso de los medios de comunicación para transmitir el mensaje cristiano. Lo ha hecho con profusión.

--Francisco Álvarez Martínez, nacido en 1925 en Llanera, Asturias, cardenal desde 2001, arzobispo emérito de Toledo, cuya Sede Primada ocupó entre 1995 y 2002, siendo sucedido en el cargo por Antonio Cañizares.

Doctor en derecho canónico. Obispo desde 1973. La preocupación por las vocaciones sacerdotales y las personas más desfavorecidas ha sido constante durante toda su actividad pastoral, según su biografía oficial.

En el consistorio extraordinario de su nombramiento junto a otros quince nuevos cardenales, recordó que igual que en el inmediato pasado lo más importante había sido la doctrina social de la iglesia en el ámbito del trabajo, ahora el "desafío mayor" es la familia.

Actualmente en la Curia vaticana es miembro de los Pontificios Consejos para los Laicos y para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.

6.- Lluís Martínez Sistach, nacido en 1937 en Barcelona, fue nombrado arzobispo de Barcelona en junio de 2004 para sustituir al cardenal Carles y acaba de ser hecho cardenal, después de que  Benedicto XVI diera prioridad a Cañizares, diez años más joven, a la hora de nombrar a un español. Se le conoce por las prudencias, los matices y la astucia del buen canonista. Doctorado en Roma en Derecho Canónico y Civil, y en 1983 elegido presidente de la Asociación Española de Canonistas.

Desde 1999 es miembro del "Consell Social de la Llengua Catalana" de la Generalitat de Catalunya. Es un nacionalista conservador. La revista neoconservadora Alba hace hincapié en lo segundo, diciendo que 'ha dejado siempre muy clara su defensa de los derechos de los padres a elegir el modelo de educación para sus hijos... Han sido rotundas sus manifestaciones contra la legalidad de la escuela laica y el aborto, a favor de los derechos del concebido, del verdadero matrimonio y de la familia. Se lo ha dicho a las autoridades y políticos catalanes... Jamás bendijo la reforma del Estatut ni su nuevo texto’. Dicen también -y es verdad- que es admirador de Juan Pablo II y de Benedicto XVI.

Lleva al menos un año asegurando que a la Iglesia catalana le continúa "preocupando mucho el papel de la COPE" y añade que, como catalán, se ha sentido "ofendido" por algunas de las afirmaciones que ha oído en la emisora. "La Cope no nos ayuda en nuestro ministerio y no ayuda al papel de los cristianos en la sociedad y crea una desafección respecto a la Iglesia", dice.

Desde 1979, Vicario General de la archidiócesis de Barcelona. A continuación, obispo auxiliar de la misma en 1987, y después arzobispo de Tarragona desde 1997 hasta volver a Barcelona como cabeza de la iglesia catalana.

En la CEE, pertenece a la Junta Episcopal de Asuntos Jurídicos, que presidió entre 1990 y 2002. En la Curia Romana es miembro del Pontificio Consejo para la Interpretación de los Textos Legislativos de la Iglesia, y consultor del Pontificio Consejo para los Laicos.

7.- Carlos Osoro Sierra, nacido en 1945 en Castañeda (Cantabria), es arzobispo metropolitano de Oviedo, desde principios de 2002. Según el diario asturiano La Nueva España, figuraba entre los candidatos a la presidencia de la Conferencia Episcopal en las últimas elecciones, como una de las opciones en caso de que el cardenal Rouco Varela no fuera reelegido para un tercer mandato. 'Hay que apoyar y ayudar a Zapatero', manifestaba en una entrevista publicada por ese periódico. En esta misma línea, ha negado que la religión esté perseguida en España. Se dice que mantiene también amistades comunes con el presidente Zapatero que hacen de mensajeros entre ambos. Se conocieron en Asturias en septiembre de 2002, durante el funeral por el cabo de la Guardia Civil Juan Carlos Beiro, víctima de ETA.

Osoro cuenta con un perfil moderado, que le ha alejado de declaraciones agresivas al referirse a las tensiones de los últimos meses entre Iglesia y Estado. Además de ello, es un 'rouquiano' relevante, basado en su lealtad y en su vinculación personal a Rouco Varela, que se remonta al menos a los años en los que el prelado asturiano estudiaba en la Universidad Pontificia de Salamanca y el ahora cardenal era catedrático y vicerrector de la misma.

'Sin alcanzar el nivel intelectual de Rouco, Osoro sí cuenta con ese talante moderado que una parte de los obispos pueden desear en este momento', señala una persona próxima al prelado. A su estilo más pastoral que intelectual, se suman sus dotes para las distancias cortas, es decir, su afabilidad y cordialidad en el trato.

Fue instructor de educación física y maestro antes de ingresar en el seminario para vocaciones tardías. En 1976 vicario general de la diócesis de Santander, donde va ascendiendo en influencia hasta ser nombrado obispo de Orense en 1997. Reelegido para un segundo trienio presidente de la Comisión Episcopal del Clero.

8.- Juan Antonio Martínez Camino, nacido en 1953 en Marcenado-Siero (Oviedo), fue elegido Secretario General de la CEE en 2003 cuando ejercía como catedrático de Teología Dogmática de la Facultad San Dámaso de Madrid. Se ha ido ganando a pulso la inquina de los comentaristas religiosos 'progres', que dicen que puentea a Blázquez y le acusan de ser un submarino de Rouco. Desde luego se ha hecho muchos enemigos en los difíciles pasillos de la conferencia episcopal. 

Es un jesuita disidente del que los dirigentes de la Compañía abominan. Ha hecho frente a ataques continuos y despiadados desde que ejerce de portavoz, ha mantenido su comunión con Rouco y ahora es obispo, algo inédito para un jesuita español.

Oyéndole y leyéndole, se comprende que estamos ante el verdadero ideólogo de la CEE.  Fue director de la Comisión para lo doctrina de la fe de la CEE de 1993 a 2001. Ha sido colaborador de la programación religiosa de la cadena COPE y perito en la II Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para Europa. En la actualidad, además, es miembro de la Academia Internacional de Ciencias Religiosas y pertenece al Consejo de Redacción de la revista Communio, la que agrupa a los teólogos 'ratzingerianos'.

Se le considera un auténtico neoconservador. Obispo auxiliar de Madrid a los 54 años, tiene por delante un brillante futuro. Se dio por hecho el pasado año que iría de secretario a la congregación de educación del Vaticano, pero no fue así, lo que ha permitido que siga en España asegurando el predominio conservador actual.

Su cargo debe ser votado junto con el de presidente. Sus atribuciones le definen como "instrumento al servicio de la Conferencia para su información, para la adecuada ejecución de sus decisiones y para la coordinación de las actividades de todos los organismos de la misma". Su poder es, pues, mucho, quizás el mayor tras presidente y vicepresidente.

En 1976 entró en la Compañía de Jesús, siendo ordenado sacerdote en 1980. Doctor en Teología por la universidad de Sankt. Georgen, Frankfurt (Alemania),y licenciado en Filosofía y Letras. Tras desempeñar varios cargos dentro del organigrama de la Compañía de Jesús, llegó a la CEE en 1993. 

9.- Fernando Sebastián, fue arzobispo de Pamplona y vicepresidente de la CEE pero actualmente no ocupa ningún cargo directivo en ella. Tiene 75 años y se acaba de jubilar. Sin embargo, como presidente de la comisión que redactó la última instrucción pastoral, ‘Orientaciones morales ante la situación actual de España’, su figura ha adquirido aún mayor relevancia como puente entre tendencias y hombre de confianza de la presidencia.

En una de sus últimas 'Carta desde la Fe' decía: "Queda pendiente en España un debate sereno y razonable sobre el acomodo de la Iglesia y de los católicos en la sociedad democrática".

En un artículo en ABC firmado conjuntamente con el secretario Martínez-Camino para dejar clara la sintonía común y acallar a los eternos 'busca rencillas', decían que "la unidad de España es un elemento fundamental de bien común de la sociedad española", y que "los obispos consideran que las pretensiones nacionalistas independentistas no están hoy moralmente justificadas en el caso de España". Aún más, añaden con contundencia: "Nótese bien: hay que superar no sólo el separatismo, sino incluso el peligro del mismo. Por tanto, la Asamblea precisa que no es moralmente aceptable la secesión, es decir, la ruptura de la unidad política de España por medio de la llamada autodeterminación, que implicaría la negación 'unilateral de la soberanía de España' (nota 37)".

Y en una entrevista ha dicho: "Para modificar la unidad política de España, tenemos que ser consultados todos los afectados, directa o indirectamente. Para un caso de secesión, no basta que haya mayoría en la región cuestionada: tiene que haber mayoría en toda España. Eliminar esto recurriendo al engaño, al falseamiento de la historia, al victimismo o la violencia, no es una política justa. Y finalmente, cumpliendo estos requisitos de orden moral, que no político, la Iglesia no tiene nada que decir. Si un día en España se quiere más centralismo, más autonomismo, hasta más federalismo o confederalismo, o lo que se quiera, la Iglesia no tiene nada que oponer".

Añadiendo:"Los laicistas estarían mucho más contentos si en la sociedad hubiera un 20 por ciento de católicos, un 15 de musulmanes... varias religiones, todas en pequeñas proporciones, para que ninguna tenga un peso notable en el conjunto de la sociedad. Pero es que a la mayoría de los españoles les da la gana ser católicos, y el Estado no tiene por qué modificar esa situación".

10.- Agustín García-Gasco Agustín (castellano, 1931), el arzobispo de Valencia premiado con el capelo de cardenal por la organización del Encuentro Mundial de las Familias el año pasado en  Valencia al que asistió Benedicto XVI, ha redoblado sus intervenciones públicas aceptando el testigo del 'quemado' Cañizares, en un interesante ejemplo de carrera eclesial por equipos.

Buen polemista y orador, directo y franco, dicen que es simpático y que de joven era muy apuesto hasta el punto de ser comparado con Paul Newman. Lo mismo es cierto.

Lo que sin duda lo es, es que el cardenal Garcia Gasco ha conseguido que los anticlericales unan su nombre al de los dos odiados 'antonios' -Rouco y Cañizares- como principal objeto de sus críticas. El presidente del Gobierno, el de la Junta de Andalucía y el ministro de Sanidad le han hecho blanco explícito de sus críticas. "Las cosas en su sitio y cada uno en su sitio, no es asumible que cardenales digan que leyes como la del divorcio, el aborto o el matrimonio entre homosexuales debilitan los derechos humanos", le espetó directamente Zapatero. Se sabe que la alocución del arzobispo de Valencia fue la que provocó más irritación en el PSOE y el Gobierno.

Odiado -y no exageramos- por el clero progre-nacionalista valenciano, sin embargo fue obispo auxiliar del cardenal Tarancón en Madrid en 1985 e incluso secretario general de la Conferencia Episcopal durante cinco años. Desde abril de 2007 es presidente de la comisión para la Doctrina de la Fe de la CEE. Se le considera cercano al Opus Dei.

Nació en Corral de Almaguer (Toledo) en 1931 y fue nombrado arzobispo de Valencia por Juan Pablo II el 24 de julio de 1992. Sacerdote desde 1956, desarrolló sus primeras funciones eclesiásticas en la diócesis de Madrid, como párroco, delegado de Cáritas y profesor de la Escuela de Cursillos de Cristiandad. Licenciado en Teología por la Universidad de Comillas.

Ha sido destacado impulsor junto con Cañizares y Rouco de las canonizaciones de víctimas católicas de la Guerra Civil, "la mayor persecución religiosa de la historia moderna". Su último proyecto es la Parroquia Santuario de los Beatos Mártires Valencianos, cerca de la Ciudad de las Artes y las Ciencias.