Esposo de Ingrid Betancourt teme que muera

"Mi mayor temor es que se muera, que no aguante más", declaró hoy Juan Carlos Leconte, esposo de la ex candidata presidencial colombiana Ingrid Betancourt, secuestrada hace seis años por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC.

"Debido a este largo secuestro se le ha dañado totalmente (el hígado) y por eso le ha provocado varias veces la hepatitis. Nosotros tememos por su vida y por eso estamos en esta angustiosa lucha contra el reloj", declaró, desde Bogotá, a radio Cooperativa.

El esposo de la ex candidata presidencial en poder de las FARC recordó que en febrero de 1997 Betancourt efectuó una huelga de hambre de 15 días en el Congreso de la República "para protestar por el ingreso de dinero de narcotráfico a la campaña presidencial de aquel entonces".

"Esa huelga la dejo muy mal del hígado, que se averió", sostuvo.

Leconte ratificó, asimismo, la veracidad de una carta enviada por Betancourt en la cual afirmó que "la muerte me parece una opción dulce....No tengo ganas de nada y creo que esto último es lo único que está bien: no tener ganas de nada".

Precisó que esa carta fue escrita por su esposa a su madre en octubre pasado, interceptada por el ejército colombiano en noviembre y filtrada por las autoridades colombianas a la prensa.

"Lo que dice es cruel, es verdad. Ella también dice que están viviendo allá como si estuvieran muertos, que es propio de un infierno y que es a la que peor tratan por su carácter rebelde", aseveró.

"Se ha tratado de escapar cinco veces y la guerrilla se ha ensañado con ella por su carácter", agregó.

Leconte recordó, empero, que a través de Luis Eladio Pérez, uno de los ex parlamentarios liberados hace dos días por las FARC, su esposa "lanzó un grito de urgencia".

"El (Pérez) la vio a ella el pasado 4 de febrero y contó que está en un estado de salud deplorable y que había que sacarla inmediatamente de allá porque ella ya no aguantaba más", sostuvo.

Leconte agradeció el rol del presidente venezolano Hugo Chávez en la liberación de seis secuestrados porque "ha mostrado resultados concretos. Nosotros le hemos pedido que no nos abandone".

Agradeció a Chávez el mensaje público que envió al jefe de las FARC, Manuel Marulanda, para que cambie de lugar a Betancourt y la lleve adonde tenga más acceso a salud, a alimentación e higiene.

"Confiamos también en la senadora Piedad Córdoba y esperamos que redoble los esfuerzos, ahora que esto se convirtió en una emergencia, para ver si podemos traerla (a Betancourt) a la libertad antes que esto termine en tragedia", urgió.

Leconte criticó duramente al gobierno del presidente Alvaro Uribe porque "desafortunadamente no nos apoya en nada, es totalmente insolidario y además nos agreden".

"Yo no entiendo cómo pueden dormir sabiendo que hay miles de colombianos en iguales circunstancias que mi esposa, pudriéndose en la selva, al borde de la muerte", afirmó.

"Hay soldados y policías que ya llevan más de diez años en la selva colombiana y deben estar en condiciones similares a las de mi mujer", concluyó.