Se acabaron las excusas

Hay consenso en que los niños deberían ser los primeros. Sin embargo, el Informe Unicef 2008 muestra que a pesar de progresos, siguen existiendo pronunciadas brechas entre el consenso y la realidad.

Las muertes prevenibles. Todos los días 26.000 niños menores de 5 años mueren en el mundo por razones prevenibles. En Noruega, Finlandia, o Suecia mueren sólo 3 de cada mil antes de esa edad, en los países más pobres 155, y en América Latina 31; 300.000 el año pasado.

El peso de la desnutrición. La desnutrición de la madre y de los niños es causante del 50% de las muertes. En América Latina el 25% de las madres están afectadas por ella, y es causa del 42% al 57% de las muertes de niños.

Deberían ser muy atentamente escuchados los llamados de alarma realizados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la familia de organismos internacionales ante la elevación mundial de los precios de los alimentos. Entre los más afectados, se hallarán los niños.

Las insuficiencias en lactancia materna. La Organización Mundial de la Salud señala que son imprescindibles seis meses de lactancia materna exclusiva. Es la mejor fuente de nutrición para un niño, y fortalece su sistema inmunológico. El 60% de los niños del mundo no la reciben.

Falta de agua y sanitarios. En los países en desarrollo el 20% de la población no tiene agua potable, y el 50% no tiene instalaciones sanitarias adecuadas. El 88% de los 2 millones de muertes de niños por diarrea se atribuye a ello. En América Latina el 23% de la población no cuenta con instalaciones sanitarias.

La alta mortalidad materna. Con avances las muertes de madres durante el embarazo o el parto siguen siendo elevadas. 500.000 madres perecen anualmente, el 98% en países en desarrollo.

En ellos, un 25% de las mujeres embarazadas no reciben ninguna visita de algún personal capacitado (médico, enfermera o partera). Sólo el 59% de los partos se hacen con asistencia médica, y sólo el 50% tiene lugar en una instalación de salud. Los hijos de madres que perecieron tienen menos posibilidades de llegar a un año. En América Latina con significativos progresos, en los que instituciones líderes como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) han tenido un rol clave, los esfuerzos requieren el apoyo colectivo, 23.000 madres mueren anualmente.

Los niños invisibles. Si el niño no es inscrito cuando nace, ello va a afectar duramente su futuro.

Hay 51 millones de niños no registrados según la Unicef. En América Latina el 11% de los niños en general y el 17% de los rurales, se halla en esa condición.

Éstas y otras brechas tienen solución. Así por ejemplo, con sólo 20 dólares se podría dar a un niño al nacer las inmunizaciones básicas. Se necesitan agresivas políticas nacionales, y mucho más ayuda internacional. En el mundo y en América Latina se terminaron las excusas para seguir postergando la prioridad más básica: defender la vida de los niños.

El autor es asesor Principal de la Dirección del PNUD/ONU para América Latina
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