Fuentes de seguridad dijeron que al menos 10 personas murieron y otras 20 resultaron heridas en los combates. Durante la noche se escuchó el ruido de las explosiones de granadas y disparos de armas automáticas de los peores enfrentamientos internos desde la guerra civil de 1975 a 1990.
El líder de la coalición gobernante, Saad al Hariri, propuso un acuerdo para terminar la crisis bajo la cual la decisión del Gobierno que enfureció a Hezbolá sería considerada como un "malentendido". La decisiones serían enviadas después al Ejército libanés, que se ha mantenido neutral en los combates, lo que daría al comandante de las fuerzas armadas, general Michel Suleiman, la opción de suspender su implementación.
Pero el canal de televisión Al Manar, de Hezbolá, citó posteriormente a una fuente de la oposición que rechazaba cualquier idea para poner fin al conflicto que no fuese la propuesta del líder del grupo, Sayyed Hassan Nasralá, que fue presentada el jueves. Nasralá ha exigido que las medidas que el Gobierno adoptó esta semana sean rescindidas.
Por su parte, el Consejo de Seguridad de la ONU pidió "calma y moderación", instando a todas las partes a regresar al diálogo pacífico. Mientras, la Casa Blanca urgió a Hezbolá a terminar sus actos "perjudiciales".
Combatientes de los movimientos chiítas Hezbolá y Amal intercambiaron disparos de fusiles y lanzagranadas en varias zonas de la capital con hombres armados del Gobierno, entre ellos algunos leales al movimiento sunita Futuro. Fuentes de seguridad dijeron que hombres armados de Hezbolá tomaron el control de, al menos, cinco oficinas del grupo Futuro de Hariri y casas de funcionarios pro gobierno vigiladas por policías. Muchos vehículos y tiendas fueron incendiados y decenas de civiles aterrorizados huyeron de las zonas conflictivas.
Tres tenistas españolas, retenidas en Beirut
Las tenistas españolas Marta Marrero, Lourdes Domínguez y Eva Fernández Brugues, así como su entrenador, se encuentran retenidos en un hotel de Beirut a causa del conflicto que vive la capital de Líbano, donde los enfrentamientos entre los partidarios del Gobierno y las milicias de Hezbolá causaron ayer al menos diez muertos, según informó hoy a Europa Press el novio de una de ellas.
Según Xavi Rubio, el novio de Eva Fernández, las tres tenistas se encontraban en la capital libanesa para participar en un torneo de la Federación Internacional de Tenis (ITF) cuando se vieron atrapadas por el conflicto.
"Están retenidas en el hotel, pendientes de salir", explicó. "No pueden salir del hotel ni dirigirse al aeropuerto, hay francotiradores en las calles", añadió. El hotel se halla a media hora del aeropuerto pero "ni siquiera pueden coger un coche", precisó.
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