Casi 300.000 inspecciones en las viviendas protegidas de la capital

El Servicio de Inspección de Viviendas Municipales, SIVIM, garantiza que el gran esfuerzo solidario y colectivo que supone la construcción de vivienda pública, para su adjudicación a precios muy inferiores a los del mercado, tiene como destinatarios ciudadanos que cumplen las condiciones que fija la Ley.

Desde que el SIVIM comenzó a funcionar, en enero de 2005, ha realizado 296.659 visitas en las que se han inspeccionado 21.607 viviendas de las 297 promociones que componen el patrimonio municipal de vivienda protegida, ya sea en venta o en alquiler.

Incidencias más comunes
En las inspecciones realizadas se han detectado 2.397 incidencias, de las cuales se han archivado 1.970 tras comprobar los requisitos, y se han abierto 427 expedientes, en los que se está trabajando para la interposición de la correspondiente demanda judicial que permita recuperar las viviendas de aquellos adjudicatarios que hayan incumplido las condiciones de la adjudicación.

Las irregularidades más comunes se agrupan en cinco bloques: la vivienda está vacía, 63 por ciento; en la vivienda hay una persona diferente al adjudicatario, 25 por ciento; adjudicatario fallecido, 5 por ciento; no facilita los datos, 5 por ciento, y otros casos, 1 por ciento, del total de los expedientes tramitados.

Todo este proceso se lleva a cabo con el propósito de poder volver a adjudicar la vivienda a quien tenga una necesidad real de la misma.

Inspecciones
El proceso de inspección del SIVIM se lleva a cabo de dos formas en función de su origen. En primer lugar se realizan las inspecciones aleatorias, que se hacen en viviendas seleccionadas al azar un  mínimo de dos veces al año. En segundo lugar, se realizan las inspecciones dirigidas, que son aquellas que se hacen sobre las viviendas en las que presumiblemente se están cometiendo infracciones.

Estas inspecciones vienen motivadas por quejas o reclamaciones de vecinos, impagos de rentas, segundas y sucesivas visitas en el supuesto de haber observado indicios de irregularidades en la primera visita, etcétera. En ambos tipos, la mecánica de la inspección es la misma y los inspectores acuden debidamente identificados.