El presidente interino de la entidad, César López, a través de un contacto telefónico, cerca al medio día relató lo sucedido en horas de la mañana, cuando al tañido de las campanas aparecieron en el centro del lugar decenas de personas identificadas como contrabandistas y comerciantes.
López indicó que su vehículo recibió pedradas, e incluso le rompieron los vidrios, asimismo, los funcionarios que se encontraban con él fueron apedreados e insultados, no quedando más remedio que abandonar el lugar.
Sin embargo, dijo, que pese a este tipo de hechos, que sin duda pretenden evitar que el Gobierno corte la actividad ilegal del contrabando, se proseguirá con la implementación del plan estratégico presentado el jueves.
Resultado de las agresiones y la interrupción violenta del acto de posesión de uno de los comandos de control del contrabando, las oficinas del servicio aduanero en Desaguadero quedaron destruidas, y con ello se desconectó el sistema, por lo que temporalmente la atención fue suspendida.