Obama está entre Hillary y otras opciones de candidato a la vicepresidencia

Todas las miradas están puestas hoy en Hillary Clinton. Un día después de que Barack Obama consiguiera el número de delegados que le asegura ser el candidato demócrata en las elecciones de noviembre, la ex primera dama ha conseguido centrar toda la atención en Estados Unidos.

Muchos se preguntan ahora si Obama elegirá a Hillary para que lo acompañe en la campaña como candidata a la vicepresidencia y si ésa es una posición que la ex primera dama aceptaría de buen gusto.

Por lo pronto, son bastantes las voces entre los seguidores de Clinton que piden el famoso "ticket" conjunto y otros tantos que recomiendan a Obama que apueste por ella para batir al candidato republicano, John McCain.

Barack Obama recibe así presiones de dentro y fuera de la campaña de Hillary Clinton para escoger a la senadora como compañera de fórmula, aunque el virtual candidato demócrata a la Casa Blanca tiene, por el momento, otras opciones.

Mientras Hillary guarda silencio, Obama ya ha destacado la valía de su hasta ahora oponente en un acto en Washington, donde ha participado en la reunión anual del poderoso grupo de presión pro-israelí Comité de Asuntos Públicos Estadounidense-Israelí (AIPAC), en la que Clinton también se encontraba.

"Clinton es una extraordinaria líder del partido demócrata y ha hecho historia junto a mí durante los últimos dieciséis meses. Estoy muy orgulloso de haber competido con ella", ha asegurado el senador de Illinois, quien también ha reconocido el "gran honor" que siente al haber sido elegido.

En ese mismo marco, Obama ha explicado que su prioridad debe ser la de "unificar el partido", después de las maratonianas primarias que han celebrado los demócratas y sí ha reconocido que mantendrá contactos con Clinton en breve.

"Hoy he hablado con Clinton y mantendremos una conversación en las próximas semanas" ha dicho Obama, quien se ha mostrado convencido de que "un partido demócrata unidos ganará las elecciones en noviembre".
Entre tanto, el senador de Illionois ya ha recibido presiones para que incluya a Clinton en su candidatura.

Entre ellas, se incluyen las provenientes de varios prominentes simpatizantes de Clinton, como el multimillonario afroamericano Robert Johnson, quien ha reconocido en declaraciones a la cadena CNN que está dispuesto a movilizar a multitud de miembros del partido para que presionen a Obama en la elección de su acompañante a la Casa Blanca.

"Si el partido pide a la senadora Clinton que trabaje para que Obama sea elegido, lo hará con el mismo empeño que ha trabajado hasta ahora", ha dicho Johnson, quien asegura que los demócratas pueden derrotar a McCain gracias a un tándem tan "dinámico" como el de Obama-Clinton.

Esa opinión es aceptada entre muchos demócratas, que ven cómo Clinton podría ayudar a llevar Obama a la Casa Blanca recabando de nuevo el apoyo de franjas de población tan importantes, como la hispana o la clase blanca trabajadora que tanta simpatía le tienen pero que se le resisten al que será el primer candidato afroamericano de la historia de Estados Unidos.

Desde las filas de Clinton, se reconoce que a muchos de sus seguidores les gustaría verla participar en la campaña presidencial, algo que ha reconocido sin tapujos el director de su campaña, Terry McAuliffe.
 
Los hombres de Obama, sin embargo, prefieren ser más cautos y aseguran que no se está trabajando en ningún acuerdo para que Clinton acepte la candidatura a la vicepresidencia.