Clinton dice adiós al sueño de ser la primera presidenta de EEUU

El sueño de Hillary llega hoy a su fin. La senadora de Nueva York dejará aparte su aspiración a la candidatura demócrata a la Casa Blanca  y lo hará con un baño de masas en Washington.

El acto de despedida concentrará a un nutrido número de sus simpatizantes, a los que la ex primera dama quiere agradecer el apoyo que le han brindado durante los diecisiete meses que ha durado su campaña por la nominación demócrata.

En un comunicado, la campaña de Clinton indicó que el acto tendrá lugar a partir del mediodía local en el National Building Museum de Washington.

La senadora por Nueva York expresará formalmente su apoyo a Barack Obama, que el pasado martes logró la candidatura demócrata para las presidenciales de noviembre.

El anuncio se produce después de que ambos aspirantes presidenciales se reunieran la pasada noche en Washington en el hogar de la senadora por California Dianne Feinstein, una firme partidaria de Clinton, para abordar el camino a seguir de cara a las elecciones de noviembre.

Hasta ahora no ha trascendido el contenido de la reunión, que según Feinstein, se celebró a puerta cerrada y con tan solo los dos senadores presentes.

"Cerré la puerta, les dejé solos y subí a trabajar. Cuando terminaron su reunión, me avisaron", declaró Feinstein.

Se espera que en su discurso en el acto de mañana, Clinton inste a los demócratas a unirse y respaldar a Obama para derrotar al candidato republicano, John McCain, en las elecciones del 4 de noviembre.

Si la senadora hubiera decidido simplemente suspender su campaña, en lugar de ponerle fin de manera definitiva, eso le hubiera permitido seguir celebrando actos electorales, en especial de recaudación de fondos.

La campaña de Hillary se encuentra en "números rojos" superiores a los treinta millones de dólares y la senadora se vio obligada a poner dinero de su bolsillo en dos ocasiones, por un total de 11,4 millones de dólares.