En un comunicado, el asesor para América Latina de la compañía, James Craig, sostuvo que con esas declaraciones, Fajardo, que representa a 47 demandantes contra Texaco, firma fusionada con Chevron, sólo "pretende obtener una suma delirante de dinero".
Como líder del Frente para la Defensa de la Amazonía (FEDAM), el abogado Pablo Fajardo denunció a Texaco por haber provocado a la población de la Amazonía ecuatoriana daños irreversibles, como malformaciones, problemas dermatológicos y un índice de cáncer alarmante, además de la desaparición de dos pueblos indígenas.
Según declaraciones del abogado el pasado 2 de septiembre, un dictamen pericial cifra entre 8.000 y 16.000 millones de euros (entre 11.360 y 22.720 dólares) la compensación económica para este caso, que comenzó en 1993 y para el que espera una sentencia el próximo año.
En el pleito ante los tribunales ecuatorianos, Fajardo acusó a la petrolera de haber contaminado "de forma premeditada", "irresponsable" y "racista" los ríos de la Amazonía de su país.
Para Craig, el abogado "exagera escandalosa y deliberadamente el tamaño del área de operación de Texaco en Ecuador" al decir que esta empresa tuvo una concesión de 1.400.000 hectáreas en 1964, mucho antes de la fusión con Chevron.
Por el contrario, refutó el representante de la petrolera, al terminar el acuerdo con el Gobierno ecuatoriano la extensión contemplada era de 442.926 hectáreas y "el área de intervención apenas llegó a 4.415 hectáreas".
También comentó que el abogado "oculta" la política de colonización del Ejecutivo de Ecuador, lo que a juicio de la petrolera "ha sido la principal causa de migración hacia la Amazonía, con el consiguiente impacto en el ambiente y en los pueblos indígenas".
De acuerdo con Chevron, la población de la región al comenzar la explotación petrolera, a comienzos de la década de los 60, era de unos 25.000 habitantes y actualmente es de más de 300.000.
Esta colonización, argumentó, ha sido la causa del mayor impacto en la región amazónica de Ecuador, si bien reconoció que "el petróleo también ha causado diversos impactos".
Pero para Chevron "este abrumador impacto ambiental es responsabilidad de la empresa estatal ecuatoriana Petroecuador", que durante los últimos 18 años ha operado los campos en los que se han registrado "más de 1.000 derrames, algunos de ellos catastróficos".
Además, según Craig, "Fajardo habla en forma arbitraria de 500 casos de cáncer" que no ha documentado.
Fajardo también recordó en Zaragoza que durante el proceso contra la petrolera un hermano suyo fue asesinado y agregó que él no podía decir "que Chevron lo mató", pero "tampoco" podía decir "que no fueron ellos".
Ante esto, la petrolera aseguró que en sus declaraciones a las autoridades ecuatorianas, Fajardo señaló "a los tres individuos que fueron responsables por la muerte de su hermano, así como las circunstancias que condujeron a ella".
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