El curso escolar y sindical

Hoy se ha abierto el telón del teatro de los sueños, de los sueños del futuro y de los producidos por el primer madrugón de la temporada. Se ha augurado el nuevo curso escolar, la vuelta al cole, a las aulas, tantos meses ausentes de vida.

Huele a tinta de libros vírgenes, a mochilas recién estrenadas, a uniformes impolutos; vuelven los padres a vivir la experiencia de cada año, y quizá a recuperar tiempos pasados cuando ellos eran niños y llevaban menos libros, apenas se conocían las mochilas y a sus padres el curso no les salía por un pico de la cara, como les sale hoy a ellos los gastos de sus hijos.

En los corrillos de madres y padres se hablaba esta mañana algo de educación para la ciudadanía, pero sobre todo, de cómo le ha salido a cada uno el inicio del curso, es decir, de cuánto les ha costado, de qué manera la apertura escolar ha mordido sus economías familiares. Y han vuelto los duelos y quebrantos a los corrillos, y las vallas de los colegios son el muro de las lamentaciones de muchos padres atribulados por tanto gasto para tan poco niño, es decir, de tanto uniforme, tanta mochila y tantos libros para alguien que está empezando a ser alumno.

Y además, ese desasosiego presupuestario llega en malos momentos, en plena crisis económica, donde para unos estamos preparados para afrontarla y para otros nos veremos con el agua al cuello, según sea gobierno u oposición quien diagnostique, mientras que para la mayoría, los sufridores en su conjunto, la crisis es tan real como Pepiño Blanco sobre la atalaya de su apartamento gallego.

Quienes todavía no han acudido a esta cita con el problema, y de momento no se les espera, son los sindicatos, nada reivindicativos, nada protestotes, silentes ante la política de brazos cruzados del gobierno.

Bueno, en honor a la verdad, cuando hablo de los sindicatos excluyo a los de Madrid, que hoy precisamente, ambos, CC.OO y UGT, han convocado rueda de prensa conjunta para evaluar la situación económica y laboral de la Comunidad de Madrid, que es en la que gobierna la derecha y donde está el campo abonado para la crítica, para hacer diagnósticos pesimistas, para exigirle medidas al gobierno de Esperanza Aguirre, mientras que en el conjunto de España los sindicatos padecen un fuerte proceso de crisis reivindicativa.

Así empieza el curso escolar, sindical y político. De forma especial el político, que esta semana tiene en Madrid debate sobre el estado de la región y congreso regional del PP. ¿Quién da más?.