Movidas

La movida más relevante que tenemos en la mente los ya jubilados es la relacionada con los primeros años de la transición hasta mediados los años ochenta. Diez años de movidas más-menos móviles y en bastantes casos sobre valoradas desde todos o casi todos los puntos de vista-observación.

Hoy, cuarenta y tantos años después, empieza a ser una anécdota más de rebeliones-revoluciones-culturales-sociales frustradas, o casi… anécdota como son los restos de la movida de los hippies en EEUU y poco después la movida del 68 en París… frustrada porque el fondo económico ha cambiado poco o a peor, la prueba es que en bastantes décadas los ricos solían-suelen hacerse más ricos, los pobres no levantan cabeza de verdad y los que estamos en medio vamos tirando con más ficción que convicción. Es cierto que hay más libertad, pero la libertad sin justicia social… es una estafa tan histérica como histórica. Y ojito a las consecuencias, silenciosas o sonoras, si alguien pone en duda los “avances” de la santísima trinidad económica privada: ultra capitalismo-capitalismo salvaje-dictadura capitalista. Consecuencias que hay-habrá que replicar con decisión.

Para ser partícipe, o militante en contradictorias-cuestionadas-minoritarias movidas se necesita tener medios, tiempo y un continente-contenido de protagonismo-narcisismo tan desbordante como descabellado.

A mí, otra movida posterior, “la madrileña” en este caso, me pilló casado con hijos pequeños e hipotecas medianas que había que atender “si o si”. Es decir, tenía poco tiempo para chuminadas o movidas con más publicidad que realidad… me enteraba del “suceso” por fotografías-imágenes-notas en medios informativos que vaya usted a saber lo que había o no había detrás. En la movida madrileña, por un lado salían las “niñatas-niñatos” pudientes pasándolo guay con presuntos-prometedores “artistas” diversos, y por el otro les imitaban “niñatos-niñatas con menos posibles. Lo que queda del “acontecimiento”… son muy pocos nombres de cierta relevancia por sus dichos-hechos, demasiadas muertes por excesos y bastantes reaccionarios. Sí, hay otros nombres que se apuntan a una movida mucho más de ruido-juerga-confusión que de tesón-enjundia-resolución. La movida del enigmático golpe de estado del 23F de hace justo 42 años sigue en el limbo y sin aclararse.

La famosa frase, “al loro”, que pronunció el ilustrísimo alcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván, en un festival musical en el Palacio de los Deportes allá en 1.984… la tergiversaron los enemigos de la libertad-justicia social insinuando que el viejo profesor incitaba a vicios… nada más lejos de la verdad.

El caso y la cosa es que mientras los niñatos fijos-pijos y los niñatos geniales-ingenuos jugaban a rebeldes-revolucionarios… la maligna, verdadera y trascendente movida-estrategia política, social y económica “neoliberal” la protagonizaron Reagan, Thatcher y sus cómplices-mandados por todo el mundo… todos se movieron de la derecha tradicional hacia la derecha cruel-irracional.

Claro, la calculada movida económica extrema de esas dos “autoridades” solo ha servido-sirve para que la “progresía” pique el anzuelo y también se mueva en esa dirección, hasta el punto de asumir sin cargo de conciencia-complejo las corrupciones, desigualdades, despilfarros, explotaciones, guerras o malestares sin límites que causa “su globalización”.

Movida, también es ajetreo… los ajetreos tienen buenos, regulares y malos instintos.

Movida, en Tauromaquia es interpretar el lance o suertes sin la quietud-mérito de los pies. ¡Joer!, la cantidad, sin calidad de pases, pasos y poses que los politicastros imitan sin quietud colectiva y gallarda en pies-cabeza-corazón… son, o parecen abortos de lo que parecía un romance con sus públicos-pueblos en las campañas electorales. “Aborto” es otra acepción de “movida”.

Movida, es lo que hay casi todos los pocos días hábiles de las instituciones en general y del congreso en particular para debatillos-discusiones mucho más banales que cabales.

Movida, es ambiente de actividad juvenil con sus pros-contras. La movida-movilidad joven sin experiencias-vivencias veteranas suelen ir-venir sin ton ni son…como a veces hacen los aires con veletas de quita-pon.

La movida hippie, la movida parisina del 68, la movida madrileña… ni de lejos tuvieron la suficiente actividad-entidad como para instaurar-producir acontecimientos trascendentales para el conjunto del bienestar económico-político-social-genérico. Y menos la “movida” actual en Madrid donde la provisional “IDA” se cree, o la hacen creer hija de Goliat o de Tarzán… deshaciendo educación-sanidad-vivienda y otros derechos fundamentales como si de su propiedad destructiva-negativa-privada se tratara.

En efecto, a día de hoy, en esa trama-trampa de movidas-móviles impertinentes-imperturbables, de falso, o de personal progreso “conservaduro-sociolisto”, seguimos estando.

Votar sin botar a los canallas-cerriles de este, ese o aquel partidillo sirve para nada-menos nada…el tiempo fue-es-seguirá siendo testigo.

La “movida-movilidad” urgente y necesaria no es cambiar solo de “líder”, es cambiar de mentalidad-método para lograr un mundo local-global menos avasallador-avaro-agresivo.

P.D. La muerte del Ilustrísimo cineasta Carlos Saura, en la víspera de recoger su Premio Goya de Honor, 11-2-23, es otro descabello a creencias divinas-humanas.

El pasado-reciente domingo día 12, acudo a la multitudinaria manifestación en defensa de la sanidad pública…”lo que diga IDA y su equipo” del hecho… es cero.